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Revelan que el Interferón que Cuba vendió a Sudáfrica entró al país como contrabando

El interferón que el ejército de Sudáfrica compró a Cuba, y por el cual pagó más de 16 millones de dólares, durante la pandemia de COVID-19, tuvo que ingresar al país como contrabando.

Según las investigaciones del ejército sudafricano, solo el primer envío del medicamento entró al país de manera regular, mientras que los otros dos nunca se autorizaron.

“Descubrieron que el primer envío se introdujo a través de la aduana, por alguna razón pasó por la aduana, pero que este envío se introdujo a través de una subsidiaria de Armscor, AB Logistics; que el segundo y tercer envío nunca fueron autorizados”, dijo Thandi Modise, ministra sudafricana de Defensa, a Mail & Guardian.

La funcionaria tachó toda la operación como irregular, pese a que la investigación continúa efectuándose.

“Se trata de un asunto turbio que iremos aclarando, pero ese cargamento se ha introducido de contrabando y nosotros mismos nos oponemos a eso”, añadió.

Las afirmaciones de la ministra, quien asegura que las autoridades indagarán más y tomarán las decisiones pertinentes, se basan en los hallazgos de un informe redactado por el ex inspector general de inteligencia Zolile Ngcakani, el ex director general de la presidencia Cassius Lubisi y el ex jefe de la Agencia Nacional de Inteligencia Billy Masetlha.

E documento recopila evidencias de que el fármaco fue introducido ilegalmente al país, y que también fue comprado de manera irregular por el ejército.

Mientras la ministra no criticó la meta de esta operación, la cual era proteger al ejército de la pandemia de COVID-19, la funcionaria critica fuertemente el procedimiento usado para ello.

“Queremos decir que, aunque admiramos a la defensa por tratar de hacer lo correcto para traer lo que iba a asegurar a sus tropas, lo hicieron de la manera equivocada”, recalcó.

Es necesario mencionar que el ejército realizó estas acciones irregulares, pese a que la Autoridad Reguladora de Productos Sanitarios de Sudáfrica (Sahpra) no aprobó el uso del interferón para combatir al coronavirus, señalando  que no había ensayos suficientes para comprobar su eficacia.

De acuerdo con Modise, el Gobierno cubano solicitó un préstamo de unas 500.000 dosis del Interferón, pues la Isla padecía de una escasez grave del medicamento, comprometiéndose a regresarlo, sin embargo, se tuvo que esperar a que el procedimiento de traslado se apegara a las normas, a diferencia de cómo ingresó a Sudáfrica.

“Se acercaron a nosotros para pedirnos un préstamo porque tenían una escasez (…) tuvimos que hacer lo correcto entonces, y obtener las autorizaciones correctas con Saphra, trabajar en conjunto con el departamento de salud, de modo que cuando vuelvan a ingresar los viales que hemos pagado, todos los procesos estén autorizados”, dijo la funcionaria.

De momento, las autoridades sudafricanas continuarán con las investigaciones pertinentes en este caso, que forma parte de una larga lista de polémicas relacionadas con el presidente Cyril Ramaphosa y su relación con el Gobierno de los Castro.

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