El astro del futbol, Lionel Messi, dio positivo a COVID-19 en enero de este año, poco antes de que el París Saint-Germain se enfrentara en la Copa de Francia contra el Vannes. Y mientras la enfermedad lo obligó a alejarse del deporte por un tiempo, su recuperación fue más difícil de lo que se supo inicialmente.
En una entrevista con el medio TyC Sports, el argentino confesó que la enfermedad lo afectó más de lo que sus fans se imaginan, pues la enfermedad dejó muchas secuelas en el cuerpo del atleta, quien en esa temporada se contagió junto a otros tres miembros de su equipo.
“Mal, mal, la verdad me pegó muy fuerte. Síntomas muy parecidos a los de la mayoría supongo: mucha tos, mucho dolor de garganta, fiebre, pero me dejó muchas secuelas en los pulmones”, dijo durante su entrevista.
Messi señaló que justo cuando se iba a dedicar a adaptarse a su nuevo equipo, la enfermedad le impidió entrenar por un buen periodo de tiempo.
“Regresé y estuve como un mes y medio sin poder ni siquiera correr porque me había afectado los pulmones”, dijo el ex jugador del Barcelona.
El siete veces Balón de Oro no pudo participar en tres partidos de la Liga 1, además del partido de la Copa Francia. Sin embargo, todo empeoró cuando el dedicado futbolista quiso regresar a jugar pese a no estar recuperado del todo.
“No me dejaban hacer nada, yo quería arrancar e incluso arranqué antes de lo que tenía que haber arrancado y eso fue peor. Por acelerado después me terminó perjudicando”, dijo el argentino.
El delantero confesó durante la entrevista que se sintió desesperado, pues por más que se esforzó al principio, este no pudo superar las secuelas que el virus dejó en su cuerpo.
“Ya no aguantaba más, quería salir a correr, a entrenar, quería arrancar, y al final fue peor”, añadió.
Dijo además que la eliminación de su equipo frente al Real Madrid se juntó con su difícil recuperación, por lo que esa temporada ha sido una de las peores para él.
“Eso nos mató, nos mató a mí y a todo el vestuario en general. y a todo París, porque teníamos una ilusión bárbara en esa competición”, dijo Messi.
Al ser cuestionado sobre cómo fue ver la final desde fuera, el astro dijo que fue una experiencia que le enseñó mucho, pues aprendió que no siempre el mejor es el que gana, y que la Champions no solo abarca los partidos, sino varios momentos claves de cada uno de los miembros del equipo.
“Me dan ganas de volver a ganarla, me da bronca el no poder estar allí, pero también me hace ver que no siempre el mejor gana la Champions, que Champions son situaciones, son momentos puntuales, son momentos psicológicos que agarran a un equipo, donde el mínimo error te deja fuera y el que más preparado está para esas situaciones termina ganando”, concluyó.
