La modelo y empresaria Kylie Jenner no escatimó gastos en la celebración del cumpleaños número 35 de su medio hermana Khloé Kardashian.
En honor a la más joven de las Kardashian, la billonaria de las Jenner, se dedicó a adornar su mansión con hermosas rosas blancas y rosadas.
De la misma manera, dispuso que se prepararan espacios en rosa en el que pudieran posar para fotos exclusivas, como un pequeño gimnasio, y otra zona en la que infinidad de rosas rosadas colgaban del techo.
Todo fue muy bien pensado, de manera que también las invitadas pudieran llevarse un grato recuerdo de este día tan especial para Khloé.
Con este fin, algunos de los productos pertenecientes a la colección “Koko” de su línea de maquillaje en colaboración con Khloé fueron llevados a la fiesta, así como sudaderas con el logo de la cumpleañera para que los invitados pudieran llevarse un lindo obsequio.
El clan Kardashian estuvo presente en su totalidad, nadie quiso perderse la celebración, e incluso estuvo con ellas Sophia Bush, la novia de Scott Disick, el exesposo de Kourtney, y mejor amigo de Khloé.
La fiesta estuvo muy animada, no faltó en ningún momento la buena música, comida y muchísimos regalos. Pero como si fuera poco, trajeron también un toro mecánico al que se subieron muchas invitadas y sobre el cual la mismísima Khloé tuvo un pequeño contratiempo.
La joven, quien estuvo mostrando sus curvas arriba de este juguete tan peculiar, no duró mucho encima de él, pues en pocos segundos fue derribada.
A pesar de este incidente, Khloé estaba más feliz que nunca, gozando de lo lindo, no solo del exceso de diversión, sino también de la comida, bebida, el maquillaje, la moda, etc.
