A unas semanas de que la última película de Disney-Pixar, Lightyear, desatara una enorme polémica por la inclusión de un beso lésbico, el cantante puertorriqueño Ricky Martin se pronunció contra la censura de esta escena.
Lightyear fue prohibida en 14 países por la escena de menos de 2 segundos, en la que se ve a un matrimonio de dos mujeres, sosteniendo a su hijo, y besándose brevemente en los labios.
Si bien la prohibición se dio en países musulmanes y, por tanto, altamente represivos, que incluso consideran ilegal la homosexualidad, punible hasta con pena de muerte en algunos de ellos, en occidente también ha habido facciones que han pedido la censura de la escena.
Grupos cristianos y católicos se opusieron a la “sexualización” de los personajes, e incluso llamaron a un boicot de la película, invitando a no acudir a los cines a verla.
En este panorama, el intérprete de María, declarado abiertamente homosexual desde hace más de una década, envió un contundente mensaje para quienes le han prohibido a sus hijos ver el filme.
“Esa gente que piensa que sus hijos se van a volver gays por ver ‘Lightyear’, pónganles documentales de Einstein a ver si también se les pega la inteligencia que no adquirieron por genética”, afirmó de manera contundente en una historia de su Instagram.
“Ser homosexual no es un delito ni un pecado y se trata de una orientación tan respetable como cualquier otra… La verdad es que esas personas son idiotas”, agregó bastante molesto.
Su respuesta fue bastante similar a la del actor Chris Evans (Capitán América, Avengers), quien da voz al personaje principal, y que también refirió que “esas personas son idiotas”, refiriéndose a los homofóbicos, que también tachó de “poco evolucionados”.
La publicación del boricua, padre de cuatro hijos junto a su esposo Jwan Yosef, despertó todo tipo de comentarios.
Aunque muchos eran de apoyo, pues venían en gran parte de sus seguidores, también hubo varios ataques homofóbicos.
Uno de los argumentos más comunes de las facciones homofóbicas contra la producción de Disney es que ‘la escena’ resultó ‘innecesaria’ en una película infantil, pues no hace falta “sexualizar” a los personajes, ni siquiera con escenas de ese tipo entre heterosexuales.
Sin embargo, la escena no es sexual, y se suma al millar de besos heterosexuales en pantalla que acompaña las producciones infantiles, especialmente de la ‘Casa del Ratón’, donde la mayoría incluyen al menos un matrimonio entre sus tramas.
La discriminación hacia la comunidad LGBT a nivel mundial afectó la taquilla de Lightyear, que no obtuvo las ganancias esperadas pese a ser aclamada por la crítica, y que se convirtió en una de las cintas más censuradas de la historia, por encima de películas ultraviolentas como Hostal o A Serbian Film.
