Residentes en la comunidad de Sepen, cerca de Playa Baracoa, en el municipio artemiseño de Bauta, protestaron ante las autoridades castristas, exigiendo su derecho a poder salir en balsa hacia los EEUU en busca de una mejor calidad de vida.
Las exigencias fueron hechas a la primera secretaria del Partido Comunista (PCC) del territorio, Gladys Martínez Verdecia, y a varios agentes del Ministerio del Interior (Minint).
El grupo argumenta que tienen el derecho de poder buscar algo mejor para sus familias, incluso si se debe de cruzar el mar para ello. Además, aseguraron que esto es algo bueno para las autoridades castristas, pues estas recibirían más remesas desde el extranjero.
“Si no nos quiere porque somos una comunidad ilegal, si no cabemos en este país, si nuestros salarios no alcanzan para comprar en tiendas en dólares y vivimos en apagones continuos porque no hay petróleo, entonces déjennos ir”, pidió uno de los presentes, quien fue escuchado por la multitud.
De acuerdo con la información compartida en redes sociales, esta multitud se formó este martes 30 de agosto, luego de que las autoridades decomisaran el lunes un bote que iba a ser utilizado para viajar a Florida.
“Yo entiendo que ustedes quieren cuidarnos, pero nosotros hacemos con nuestras vidas lo que queramos. En definitiva, nosotros no estamos robando nada, las balsas las hacemos con nuestros propios esfuerzos. Deberían premiarnos”, argumentó el ciudadano.
El video se corta a los pocos minutos, por lo que se desconoce la respuesta de la funcionaria, sin embargo, quedó claro que los ciudadanos de la Isla se han cansado de la escasez de alimentos, medicamentos y productos de primera necesidad que hay en el país, y están dispuestos a arriesgarlo todo en un viaje para buscar cosas mejores en el extranjero.
Es necesario señalar que en esta misma localidad, las autoridades desplegaron un fuerte operativo policial para detener una salida ilegal de Cuba, lo cual quedó captado en video.
Las grabaciones captaron a los agentes del Minint reprimiendo a los presentes, agrediendo a hombres y mujeres por igual, todo mientras arriban vehículos en los que planeaban trasladar a los detenidos.
