Alumnos de universidad en Cuba ya no deberán aprobar asignaturas básicas para terminar el primer año
Las autoridades cubanas informaron que los alumnos de Educación Superior en Cuba pertenecientes al Curso por Encuentro y la Educación a Distancia ya no tendrán que aprobar las asignaturas básicas durante su primer año de la carrera para pasar el año.
Esto fue anunciado el pasado miércoles en el programa de la Mesa Redonda, donde se indicó que el cambio se debía a las interrupciones ocurridas durante la cuarentena la pandemia de COVID-19 en la Isla.
De manera específica, el cambio elimina el requisito de aprobar con una calificación mayor a 60 puntos las asignaturas de Matemáticas, Español e Historia de Cuba, medida que se mantendrá hasta nuevo aviso.
La comunidad cubana dentro y fuera de la Isla compartió su opinión en los sitios oficialistas Cubadebate y la revista universitaria Alma Máter, señalando que la medida era para asegurar un buen número de jóvenes graduados, incluso si no contaban con las habilidades necesarias.
“Lo importante es la cantidad de graduados, no la calidad con la que se gradúan. Seguimos siendo números” y “Cuidado con eso, pues estudiantes sin necesidad de aprobar una materia pueden llegar muy lejos, independientemente a su coeficiente intelectual, y de pronto llega a presidente”, fueron algunos de los comentarios más notables.
El sector Educación en Cuba se encuentra atravesando momentos difíciles, en parte porque ese oficio es uno de los peores pagados por el Gobierno. Esto provoca que los mejores docentes decidan emigrar al extranjero en busca de mejores oportunidades, mientras que el resto es enviado junto a los médicos cubanos al extranjero.
Esta escasez de maestros fue reconocido por las autoridades de varias provincias, como Sancti Spíritus, donde existe un déficit de 923 educadores en todos los niveles educativos para el curso escolar 2022-2023.
Por su parte, La Habana comenzó a contratar docentes de otras provincias, pues no cuenta con los suficientes para el próximo ciclo escolar. Esta acción refleja la poca cantidad de personas dispuesta a permanecer en Cuba por un salario que no alcanza para nada.
