Luis Patterson, el esgrimista cubano que abandonó la delegación de la Isla durante la Copa del Mundo de Berna 2019, en Suiza, reveló cómo fueron los momentos que lo llevaron a tomar la decisión que le cambiaría la vida.
Durante una entrevista con el medio deportivo Play Off Magazine, el campeón panamericano de esgrima indicó que comenzó a planear su huida en el momento que llegó al hotel junto a sus compañeros de equipo.
Patterson, quien ahora reside en Canadá, dijo que analizó todas las posibilidades, pues sabía que si lo atrapaban intentando escapar, ya no tendría otra oportunidad igual.
“Tenía poco tiempo para tomar la decisión correcta y no cometer ningún error antes de que me recogieran el pasaporte; no podía contarle a mi familia”, declaró el esgrimista holguinero, quien pasó ocho años formando parte de la selección de dicho deporte.
Afirmó que no pudo dormir la noche antes de escapar, pues temía ser atrapado antes de poder salir. Pese a ello, mantuvo la calma y bajó a desayunar como cualquier otro día.
Después de eso, todos subieron a un chequeo de armas, el cual se realiza de manera rutinaria antes de la competencia, lo que dejó a Patterson sin compañía en el lobby.
Ese fue el momento en el que el deportista salió del hotel, preguntando a los locales cómo llegar a la estación de trenes más cercana.
“Pregunté por el camino mediante señas cómo llegar a la estación. Una vez ahí, las lágrimas salieron solas. Sabía que sería juzgado y penalizado. Mi familia y todas mis amistades sentirían la noticia. Pero fue una buena decisión. Mientras más me alejaba, más libre me sentía”, declaró al citado medio.
El esgrimista llegó a Francia, donde permaneció poco más de dos días, antes de conseguir un vuelo hacia Canadá gracias a una visa de turismo que aún estaba vigente. Una vez en el país norteamericano, Patterson logró reunirse con amigos que le ayudaron a iniciar una nueva vida.
“Mi madre era quien más me preocupaba. Otros miembros de la familia sabían todo por lo que yo pasaba día a día. Me apoyaron”, dijo el deportista.
Como consecuencia, las autoridades cubanas sacaron todos los diplomas, trofeos y medallas que ganó Patterson durante su carrera del museo de la EIDE (Escuela de Iniciación Deportiva Escolar) y el INDER (Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación) de Holguín.
El campeón de esgrima confesó que uno de los motivos por los cuales escapó fue porque las autoridades cubanas no le otorgaban el apoyo económico que solicitaba, pese a los buenos resultados que obtenía en las competencias internacionales.
“Mi casa se me caía en pedazos. Me daba pena invitar a mis amistades en los pases y vacaciones”, dijo Patterson, quien recalcó que las autoridades tampoco tenían para dotar a los seleccionados de esgrima con buenos armamentos.
De momento, el atleta cubano representa al club Dynamo Fencing en Canadá, habiendo obtenido recientemente la medalla de plata en el campeonato nacional.
