La planta de oxígeno medicinal de Granma no producirá nada hasta dentro de dos años
Las autoridades cubanas informaron que la planta de oxígeno medicinal que se está construyendo en la provincia de Granma desde hace meses no producirá nada hasta 2024.
De acuerdo con la especialista de la Empresa Gases Industriales y OxiCuba S.A., Rita María Fraga Bueno, indicó que esta millonaria inversión servirá presuntamente para abastecer de oxígeno a la región oriental de la Isla.
La funcionaria, quien no reveló la identidad de los inversionistas, indicó a la Agencia Cubana de Noticias (ACN) que este era un gasto considerable, con cifras oficiales señalando que se trataba de una suma mayor a los 235 millones de pesos cubanos.
En agosto, se informó que la fábrica produciría unas 30 toneladas de oxígeno al día, con su construcción comenzando en mayo, sin embargo, tardará otros dos años en ser completada.
Fraga Bueno indicó que, pese a que la construcción no se ha terminado, ya se está trabajando en otra inversión considerable con el Ministerio de Salud Pública (Minsap), con la que se planea instalar una mini planta de oxígeno Pressure Swing Adsorption (PSA), la cual permitirá ampliar las capacidades de almacenamiento, mientras la producción se mantiene de manera continua.
La funcionaria no especificó el costo de esta nueva mini planta, ni donde se planea colocar, pero lo más probable es que tengan que pasar años antes de que el proyecto vea la luz, al igual que la planta de Granma.
La escasez de oxígeno medicinal en Cuba fue uno de los factores que complicaron la pandemia de COVID-19 en años anteriores, pues los hospitales de la Isla no contaban con el recurso para salvar la vida de los pacientes más graves.
Esta falta de oxígeno se debió a muchos factores, como las averías de las fábricas existentes en la Isla, la falta de insumos y la falta de contenedores para almacenar el gas.
En 2019, se instaló una planta de oxígeno medicinal en el hospital ‘Carlos J. Finlay’, en La Habana, con apoyo de la UNICEF.
De igual manera, se contaba con una planta en el Hospital General Docente ‘Abel Santamaría Cuadrado’, en Pinar del Río, pero esta tenía solo una capacidad de producción de 60 metros cúbicos por hora, lo que era insuficiente para satisfacer la demanda durante la pandemia.
Como resultado, cubanos acudieron a redes sociales para denunciar la falta del importante insumo en las instalaciones de la autodenominada potencia médica, así como los precios elevados a los que tenían que comprar el gas a vendedores particulares.