Las autoridades de Cuba anunciaron que el próximo viernes 7 de abril se llevará a cabo un receso laboral debido al denominado Viernes Santo, celebrado por los católicos alrededor del mundo.
Mediante un comunicado oficial, el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social informó sobre su Resolución 2 de 2023, la cual señala que los trabajadores cubanos que recesen sus labores ese día, tendrán derecho a recibir su salario básico.
Esta decisión responde a lo establecido en la Ley 116 de 2013 del Código del Trabajo, la cual declaró el Viernes Santo de cada año como día de receso laboral retribuido, es decir, que los empleadores de las entidades y actividades que recesan sus labores deben abonar a los trabajadores el salario básico de esa fecha.
Esto se lleva a cabo salvo “que coincida con los de su descanso semanal o con aquellos en que disfrutan de vacaciones anuales pagadas, garantía salarial, licencia no retribuida o subsidio de seguridad social”, señala la prensa oficialista.
Es importante recordar que el Gobierno cubano reconoció la festividad del viernes Santo luego de décadas de prohibición. En 2012 y 2013, esta fecha se celebró con “carácter excepcional”, hasta que en 2014 se retomó la tradición que había sido interrumpida tras llegada del fallecido dictador Fidel Castro al poder.
Esta fecha comenzó a ser celebrada nuevamente en 2012, como respuesta directa a una solicitud realizada por el papa Benedicto XVI durante una visita a Cuba. El Santo Padre realizó la petición debido a que los practicantes de la religión cristiana llevaban décadas marginados en el país.
El Viernes Santo es una de las conmemoraciones más importantes y representativas del cristianismo, pues en esta se recuerda la crucifixión y muerte de Jesús. La celebración forma parte integral de la Semana Santa y durante esta, los fieles de Iglesia católica guardan ayuno y abstinencia de carne como penitencia.
