Cubano en EEUU denuncia que un juez rechazó su solicitud de asilo y negó que en la Isla hubiera una dictadura
“No gané el asilo porque me decían que en Cuba no había una dictadura, y automáticamente me entregaron una I-220B”
Un cubano identificado como Osvel Pérez Mantilla denunció tener miedo a ser deportado, esto luego de que un juez de Estados Unidos rechazara su solicitud de asilo político en el país y negara que en la Isla existiera una dictadura.
De acuerdo con la información compartida por el periodista Mario J. Pentón, Mantilla arribó a EEUU hace dos años, tiempo que pasó bajo custodia de las autoridades migratorias por ingresar al país de manera irregular.
Tras ganar su libertad, el cubano pensó que podría solicitar asilo en el estado de Luisiana, pero nada lo preparó para escuchar la respuesta que el juez le dio en aquella ocasión.
“En Cuba no hay dictadura”, afirmó este funcionario mientras le negaba el asilo y le entregaba una orden de deportación final (I-220B).
Pronto deberá acudir a las oficinas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EEUU (ICE, por sus siglas en inglés) para renovar su permiso de estadía, sin embargo, este teme que sea retenido por las autoridades como ha pasado con tantos antillanos en los últimos meses.
De ser así, Mantilla podría terminar formando parte del siguiente vuelo de deportación, operativos que se reanudaron el pasado mes de abril luego de que los gobiernos de EEUU y La Habana llegaran a un acuerdo.
“Vine a este país buscando libertad, hice mi caso de asilo en Luisiana, donde pasé dos años detenido, no gané el asilo porque me decían que en Cuba no había una dictadura, y automáticamente me entregaron una I-220B que es una orden de deportación”, dijo el cubano ante las cámaras.
Pentón señala que la situación es injusta, pues Mantilla no ha hecho otra cosa más que trabajar de manera honrada desde que recuperó su libertad en los Estados Unidos.
“Desde que llegué a este país estoy trabajando, desde que me dieron los papeles y el permiso de trabajo (…) He tenido dos trabajos, uno haciendo entregas en un camión, y después mejoré y ahora estoy en una compañía”.
El cubano afirmó estar nervioso, pues no sabía qué iba a suceder con él y con su esposa si era regresado a la Isla comunista.
Pese a esto, aseguró que continuaría realizando el proceso de manera correcta, por lo que se iba a presentar ante las autoridades para tratar de renovar su permiso de estadía en los Estados Unidos.
“Me voy a presentar mañana en las oficinas y espero que no me vaya a suceder lo peor, no quiero que me suceda y me lleven a la dictadura, esto me está afectando mucho en lo personal (…) estoy bien nervioso”, concluyó.