Niña cubana que viajó a EEUU con visa humanitaria logró vencer al cáncer
La familia indicó que el tratamiento necesario para la pequeña no estaba disponible en la Isla, por lo que pidieron ayuda para salir del país
La pequeña Vanessa Alfonso, una niña cubana de solo siete años de edad, logró vencer al cáncer luego de viajar a los Estados Unidos para recibir tratamiento profesional con ayuda de una visa humanitaria.
La noticia fue confirmada por la congresista cubanoamericana María Elvira Salazar, quien intervino hace un año luego de que la familia de la niña solicitara ayuda. Los padres de la menor indicaron en aquella ocasión que el tratamiento requerido por la niña no se encontraba disponible en Cuba, por lo que necesitaban salir del país.
“A la niña Vanessa le ayudamos hace un año con una visa humanitaria para que tratara su cáncer. En Cuba le habían dicho que no tenían la solución. Hoy Vanessa está sana. Por cosas como esta me siento tan orgullosa de ser Congresista. Todos los sacrificios en el Congreso se vuelven rosas. ¡Gloria a Dios!”, dijo la congresista en sus redes sociales.
La niña no solo recibió ayuda de la republicana, quien agilizó el proceso de visa humanitaria, sino también de las autoridades de inmigración de la administración de Joe Biden, las cuales tuvieron el último voto a la hora de decidir si la menor podía viajar a EEUU.
Jennifer Lupiañez, madre de la pequeña Vanessa, dijo que su hija había recibido un tratamiento especializado en los Estados Unidos sin costo alguno.
La mujer aclaró que eso les sorprendió, pues la propaganda de la autodenominada potencia médica había vendido una imagen diferente sobre los Estados Unidos.
“A nosotros nos hicieron creer siempre en Cuba que en EEUU el que se enfermaba y no tenía dinero, moría. Mi niña recibió su tratamiento de millones de dólares totalmente gratis”, dijo la mujer al medio de noticias Radio Martí.
La pequeña tenía un tumor de Wilms, un quiste que aparece cuando las células del cuerpo comienzan a crecer sin control. Este tiene el potencial para convertirse en cualquier tipo de cáncer, por lo que fue necesario que se le extirpara.
El tumor fue removido en la Isla, donde también le quitaron un riñón, sin embargo, este tratamiento solo tenía un 50% de probabilidad de funcionar, lo que dejó a la familia sin esperanzas.
El padre de Vanessa, Yansey Alfonso, afirmó que pasaron muchas dificultades para asegurarse de que su hija obtuviera la alimentación adecuada en la Isla, incluso cuando tenían el dinero para comprar las cosas.
Ahora, la pequeña está tomando clases en una escuela en EEUU, donde planea seguir sus sueños de convertirse en una bailarina.
