Díaz-Canel indigna a cubanos al fingir trabajar en el campo: “Circo para la foto”
El dirigente la hizo de “campesino” para intentar convencer a cubanos de trabajar de a gratis para el Estado, regalando su comida
El designado presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, nuevamente causó indignación entre los cubanos, ahora por publicar una fotografía que muchos consideraron “una burla a la inteligencia” de la población.
El dirigente ha tenido múltiples tropiezos a lo largo de su carrera política, siempre alrededor de la negación de la mala situación del país, o de reconocer la misma, echándole la culpa a terceros o incluso a los propios cubanos.
Pero en esta ocasión, el mandatario escogió fingir que sabe lo que es el trabajo, y posó para una fotografía en la que aparece sosteniendo un azadón, inclinado como si de verdad removiera la tierra en un plantío de maíz.
La foto causó indignación además por considerarse una burla a los verdaderos campesinos, quienes trabajan bajo condiciones prácticamente infrahumanas con tal de cosechar el poco alimento que hay en la Isla.
Y es que según la descripción de Cubadebate, el portal oficialista que publicó la foto, Díaz-Canel se habría levantado “despuntando el alba”, como de verdad hacen los trabajadores que todavía sostienen al país.
Díaz-Canel aparece en las imágenes con una reluciente camiseta color blanco con tocados azul y rojo, además de una gorra para el sol. La pulcritud de su apariencia fue algo que no pasó desapercibido.
“Circo para la foto, ni dentro del maíz se mete para no coger picazón. Mire la guataca y ropa que limpias, lo que da es asco y vergüenza. Tengo 80 años y jamás existió en Cuba un gobierno peor que este”, comentó una usuaria.
Por otra parte, destaca que la publicación está orientada a “motivar” a la población a trabajar de a gratis para el Estado, una estrategia que el régimen lleva tiempo intentando consolidar: que los cubanos planten comida y se la regalen al gobierno sin recibir ningún tipo de remuneración a cambio.
La iniciativa, risible en cualquier país, causa más indignación debido a varios factores, por principio, el poco tiempo “libre” disponible del cubano de a pie, que a veces depende de dos o más trabajos para poder sostenerse con lo mínimo; por otra parte, el elevado costo de los insumos para cultivar; y para terminar, el monopolio que hace el Estado de la comida, acusando de “acaparamiento” a quien conserve incluso alimentos que ellos mismos han producido.
“Si por el trabajo voluntario de ese hombre depende el pueblo, nos acabaremos de morir de hambre”; “No sabe ni coger bien la herramienta, payaso ridículo”; “Como si este hubiera trabajado un día en su vida”; “En vez de que le paguen mejor a los que lo hacen”, opinaron usuarios en redes al viralizarse la foto.
Lo cierto es que Cuba enfrenta una crisis alimentaria que se ha incrementado la última década, con el gobierno no destinando inversión al campo, y monopolizando los recursos para dedicárselos al turismo extranjero.