Adolescente de La Habana sufre asalto con machete y la policía lo revictimiza
El asaltante le puso el machete en el cuello, pero al intentar denunciar, la policía amenazó con encarcelarlo a él y a su familia
Un adolescente cubano fue víctima de un asalto en La Habana este miércoles 17 de abril, lo que ha causado gran conmoción en la comunidad por la violencia con la que se dio el hecho.
El joven iba camino a su casa desde la escuela, cuando un hombre se acercó a él y lo amenazó con un machete para que le entregara la mochila en la que llevaba sus pocas pertenencias.
Según informó la abuela del menor, Adela González Hernández, a través de su cuenta de Facebook, el asaltante logró llevarse la mochila, en la que no traía nada de valor.
El incidente resultó un susto enorme para el joven, y para su abuela cuando él se lo relató, pues aunque el nieto no puso resistencia, el ladrón lo amenazó colocándole el machete al cuello, y golpeándolo con el arma en el abdomen.
La situación además resultó una sorpresa, tanto para el joven como para quienes supieron del caso, pues todo ocurrió a plena luz del día, alrededor de las 2:00 pm.
“Traía una mochila escolar con un pomo de agua y la libreta de abastecimiento”, aclaró la anciana, haciendo énfasis en lo absurdo de asaltar a un menor de edad, y en especial en un país como Cuba.
La anciana relató, además, que fueron a hacer la denuncia a la estación más cercana, situada en la calle Blanquita, en el municipio Cerro, y allí el policía que los atendió los maltrató y desatendió su denuncia, ignorando que está, supuestamente, para servir.
“Nos dijo que el lugar para hacer la denuncia era la Cuarta del Cerro, que Blanquita no era para eso”, añadió.
Cuando la familia le reclamó al agente, este les dijo que si no se iban le podía levantar un acta al papá del joven, Osvaldo Navarro Veloz, y a su mamá también.
“Y que el niño con 16 años, aunque menor de edad, podía responder ante el tribunal. Es decir, de víctimas pasamos a victimarios”, denunció.
Los casos de robo y asaltos violentos en Cuba son cada vez más frecuentes, especialmente en la capital, donde el uso de armas punzocortantes ha dejado incluso víctimas mortales, además de lesionados graves.
Las denuncias, al igual que ocurre con las de cualquier delito real, son desatendidas, pues la policía se rehúsa a trabajar para atrapar a los criminales, ni siquiera cuando hay pruebas.
El viernes pasado, residentes en Santiago de Cuba detuvieron a un presunto ladrón que arrebató un celular a un adolescente que estaba en la puerta de su casa. La gente, harta de la incompetencia de las autoridades y de la creciente inseguridad, golpeó y mantuvo inmovilizado al ladrón hasta que llegó la policía.