Familia canadiense aún no recibe el cuerpo de su padre fallecido en Cuba
Pese a todas las denuncias, siguen a la espera de que el cuerpo del señor Jarjour sea trasladado desde Rusia, donde lo enterraron por error
El caso de la familia Jarjour, los canadienses que están a la espera del cuerpo de su padre, que fue repatriado por error a Rusia desde Cuba, se encuentra lejos de resolverse.
Pese a las denuncias interpuestas en contra del gobierno cubano, los canadienses todavía no tienen consigo el cuerpo del padre de familia, que se encuentra en Rusia tras ser intercambiado por el cuerpo de un hombre más joven, el cual debía llegar a Cheliábinsk.
Faraj Allah Jarjour, se 68 años, se encontraba de vacaciones con su familia en la Isla, cuando sufrió un infarto el pasado 22 de marzo. Luego de esperar por más de ocho horas a los cuerpos de emergencia, el cuerpo del hombre fue recogido y supuestamente preparado para su repatriación a Canadá.
Sin embargo, la familia nunca recibió el cuerpo, y a casi dos meses del fallecimiento siguen sin poder enterrarlo. Del otro lado del mundo, la familia del hombre ruso llegado a Canadá enterró el cuerpo -presumiblemente del señor Jarjour- antes de saber que no era su familiar.
Anna Neroeva, residente de Cheliábinsk, Rusia, e hija del hombre ruso, enfrentó un desolador momento tras saber que en realidad no sepultó a su progenitor. Ella insiste en que la entrega incorrecta fue deliberada y acusa a las autoridades de no querer esclarecer la situación.
“Enterramos a la persona equivocada. Mi papá nunca fue devuelto”, expresó Neroeva en declaración a Tut News.
“Tendremos que hacer una prueba de ADN y una exhumación para enviar a los canadienses el cuerpo correcto”, añadió Neroeva, recalcando que su padre lleva más de dos meses en una morgue de Canadá.
En el caso de los Jarjour, sí notaron la gran diferencia en el cuerpo cuando lo recibieron desde la Isla, pero los sacerdotes a cargo de las honras fúnebres le dijeron que era normal que los fallecidos presenten “cierta diferencia” al ser embalsamados.
“Estaba en estado de shock. Mis familiares me hicieron preguntas: ‘¿Quién es este?’ Es decir, ¿por qué se ve tan diferente? Los sacerdotes me aseguraron que es normal que ocurran este tipo de cambios al embalsamar el cuerpo”, dijo la mujer.
“Tendremos que hacer una prueba de ADN y una exhumación para enviar a los canadienses el cuerpo correcto”, añadió Neroeva, indicando que su padre lleva más de dos meses en una morgue de Canadá.
“Los canadienses no estamos protegidos en Cuba”, lamentó Miriam Jarjour, hija del turista fallecido, quien también culpó al gobierno cubano y en especial a ASISTUR, la compañía de seguros médicos cubana encargada de la entrega del cuerpo.
El caso se ha convertido en un escándalo en la Isla, siendo los canadienses los mayores visitantes del país, pues deja en evidencia la negligencia y el mal manejo de las instituciones cubanas.
Por esto, el canciller cubano, Bruno Rodríguez, se vio obligado a emitir una disculpa pública, calificando el incidente como “desafortunado”. Adicionalmente, el gobierno le reembolsó a la familia de Jarjour los 10.000 dólares que costó la operación de repatriación fallida.