Vinculan a empresario cubano Sergio Pino con plan para asesinar a su esposa
El empresario estaba siendo investigado por supuestas amenazas contra su esposa, y falleció durante una redada del FBI en su casa
A través de una grabación, el Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) logró vincular al fallecido empresario cubano Sergio Pino con un supuesto plan para asesinar a su esposa.
Es importante recordar que, antes de que se descubriera este complot de asesinato a sueldo, el urbanizador cubano estaba siendo investigado por el FBI por presuntas amenazas en contra de su pareja, y se quitó la vida cuando los agentes federales intentaban hacer un cateo en su mansión a mediados de julio en Coral Gables.
La investigación involucra también a dos personas identificadas como Fausto Villar y Avery Bivins, quienes se conocieron en prisión cuando cumplían condenas por delitos graves.
El FBI señala que Bivins fue arrestado intentando asesinar a la esposa del empresario, pero decidió cooperar con las autoridades realizando una llamada a Villar. En la grabación, Villar se escucha nervioso por la velocidad a la que avanza la investigación del FBI, y le dice a Bivins que debe borrar cualquier rastro electrónico que pudiera vincularlo a él o a Pino con el intento de asesinato.
Luego de la llamada, el FBI acudió a la vivienda del empresario para intentar arrestar a estos dos hombres, pero Pino se quitó la vida antes de que los agentes pudieran ingresar al lugar.
El empresario cubano y Villar se conocieron mientras la empresa de techado de la esposa del segundo ofrecía sus servicios en la mansión de Pino.
De acuerdo con declaraciones de Bivins, Villar dijo que tenía miedo de que el complot fuera descubierto, pues sabía que iba a enfrentar cargos por estar involucrado. En la grabación, este le dice a Bivins que, en caso de salirse con la suya, iba a haber más dinero para todos los involucrados.
Hasta ahora, Bivins, Villar y otros siete hombres han sido acusados de formar parte del complot para asesinar a la esposa del empresario.
La mujer se estaba separando del cubano, y había rechazado un acuerdo de divorcio de 20 millones de dólares. La fortuna de la pareja oscilaba entre 153 y 359 millones de dólares en ese momento, y se cree que eso fue lo que motivó el intento de asesinato.
El FBI señala que Pino llegó a contratar dos equipos para acabar con la vida de su esposa, ofreciendo 150.000 dólares si estos lograban cometer el crimen sin que se vinculara al empresario.
Estos trataron de envenenar a la mujer con fentanilo, acosarla constantemente, atropellarla con una camioneta alquilada e ingresar armados a su casa, pero esta salió ilesa de todos los intentos de asesinato.
De momento, todos los sospechosos se han declarado inocentes, pero continúan detenidos a la espera de juicio.