Apagones en Cuba agravan crisis de alimentos: leche se pudre en centros de acopio
Aunque las autoridades no mencionaron cantidad exacta, se estima que miles de litros se habrían agriado por falta de refrigeración
Los apagones que han azotado a Cuba desde el fin de semana han provocado enormes pérdidas en la producción alimentaria del país, que atraviesa de por sí una escasez aguda escasez de alimentos y especialmente de leche, donde esta ni siquiera cubría la demanda.
El ministro de la Industria Alimentaria de Cuba, Alberto López Díaz, admitió en entrevista con el noticiero de la Televisión Nacional que una de las mayores afectaciones se dio en el acopio de leche, con miles de litros que se echaron a perder.
López Díaz señaló que los apagones afectaron las zonas rurales donde se acopia la leche, con lo que se interrumpió su refrigeración y esta se agrió. Aunque no habló de una cantidad exacta, señaló que se generó un “nivel importante de leche ácida”, que agravará la crisis de alimentos de la Isla.
La leche está destinada a todos los niños menores de siete años en la Isla, y está incluida en la libreta de racionamiento. En ese sentido, el ministro señaló que se están buscando alternativas para garantizar, al menos, la distribución de leche condensada en las zonas más afectadas.
El ministro tampoco aclaró si la leche que se genere en los siguientes días le será pagada a los productores, que por obligación venden sus productos casi regalados al régimen, o si esta no se recogerá por falta de combustible y sitios para almacenarla.
Recordemos que el gobierno se encarga del manejo y distribución de toda la comida del país, por lo que, aunque no se mencionaron cifras, es probable que se hayan perdido cientos de miles de litros de leche durante los apagones que continúan desde el gran colapso del sistema eléctrico el pasado viernes 18 de octubre.
La crisis energética en Cuba ha paralizado industrias clave, como los molinos de trigo en Santiago de Cuba y Cienfuegos, lo que ha interrumpido la producción de harina en todo el país, causando a la vez una distribución irregular del pan de la bodega.
Incluso las panaderías que cuentan con insumos no han podido ponerse a trabajar debido a que la energía es intermitente. Analistas señalan que esta jornada sin energía podría tener severas consecuencias para la Isla también en materia económica, donde la mayoría de sus familias viven al día.