Yomil se queja del mal estado de las carreteras de Cuba: “Me quedé botado”
El cantante se niega a irse del país, a pesar de sus carencias y que él y su pareja han denunciado también los apagones frecuentes
Nadie se salva de las pésimas condiciones de vida en Cuba, y el reguetonero cubano Yomil Hidalgo cayó víctima de una de las fallas del régimen en la Isla: las malas condiciones de los caminos.
A través de redes sociales, el cantante compartió la frustrante experiencia que vivió luego de que dos de los neumáticos de su automóvil se reventaran a causa de las pésimas condiciones del asfalto en uno de los caminos.
En sus historias de Instagram, Yomil explicó que el incidente se dio debido a las pésimas condiciones de la carretera mientras se dirigía a La Habana.
“Ayer me quedé botado, se reventaron las dos gomas en uno de los tantos huecos que hay en el km 84 de la autopista de camino a La Habana”, escribió.
El novio de Daniela Reyes, además, aprovechó para advertir a otros conductores sobre el peligro en ese tramo de la carretera.
“Tengan cuidado todos los que manejan y pasan por ahí, que por lo que veo esos baches del km 80 al 60 parece que en Mayabeque no hay asfalto para tapar eso que lleva años así”, añadió, visiblemente molesto por la falta de mantenimiento en las vías.
Yomil y su novia Daniela Reyes han sufrido en carne propia los mismos inconvenientes que los cubanos de a pie, a pesar de lo cual él se niega a abandonar el país y sigue abriendo negocios en Cuba, manteniendo su buena relación con el régimen que lo tiene en esas condiciones.
La denuncia del cantante expone un problema recurrente en la infraestructura de Cuba, el poco o nulo mantenimiento de los caminos que representa un riesgo latente para los conductores.
Y es que los accidentes carreteros son cosa de todos los días, y aunque las autoridades señalan que muchos se deben a la imprudencia de los conductores, lo cierto es que varias denuncias son por el mal estado de las carreteras, y la falta de señalización o iluminación en las mismas.
Asimismo, la falta de refacciones para automóviles disponibles en las tiendas de Cuba, o los elevados costos de las mismas cuando llegan a existir, dificultan el mantenimiento de autos y unidades de transporte, haciéndolos más propensos a sufrir accidentes.