Régimen decreta otros dos días feriados nacionales para enero de 2025
Este anuncio se efectúa en medio de un momento de profunda crisis económica y escasez generalizada en el país
El gobierno cubano ha decretado un receso laboral para los días 3 y 4 de enero de 2025, sumándose a los feriados tradicionales del 1 y 2 de enero, según informó una edición extraordinaria de la Gaceta Oficial.
La resolución, firmada por el primer ministro de la Isla, Manuel Marrero Cruz, permitirá que los cubanos disfruten de casi una semana de descanso, iniciando desde el martes 31 de diciembre hasta el domingo 5 de enero.
El Decreto 118/2024, emitido por el Consejo de Ministros, establece que estos días adicionales de descanso buscan “reconocer el esfuerzo del pueblo durante el año 2024”. La narrativa oficialista sostiene que se trata de un gesto para premiar la fortaleza y el trabajo de los ciudadanos ante las dificultades que marcaron el año.
Según lo especificado en la Gaceta Oficial, esta decisión está respaldada por el Artículo 100 del Código de Trabajo, que autoriza al gobierno a declarar recesos laborales excepcionales. El Ministerio de Trabajo y Seguridad Social aclaró que los empleados recibirán su salario habitual durante estos días, sin necesidad de presentarse en sus centros laborales.
Este anuncio llega en un momento de profunda crisis económica y escasez generalizada, afectando gravemente a la mayoría de los sectores productivos del país. A pesar de ello, las autoridades han decidido brindar a la población este respiro, catalogándolo como una “necesidad” en medio de las tensiones cotidianas.
El receso tendrá alcance nacional y abarcará la mayor parte de las actividades económicas, aunque sectores clave como la salud, el transporte y otros servicios esenciales mantendrán sus operaciones con normalidad.
El modelo comunista vigente en Cuba ha fomentado durante años una actitud de desvinculación hacia el trabajo, deshaciendo poco a poco los valores tradicionales que, en otras épocas, promovían el esfuerzo como vía de progreso personal y colectivo.
La realidad de bajos salarios y la incapacidad de cubrir necesidades básicas ha generado desmotivación en amplios sectores de la población, donde el trabajo ha dejado de ser percibido como una vía para mejorar la calidad de vida.
Lejos del discurso oficialista, que promete que los días de descanso son un premio para el pueblo, estas medidas parecen tener el objetivo de ahorrar un poco de combustible al extender los días que los negocios no esenciales deben mantener sus puertas cerradas.
De manera similar a las medidas tomadas en meses anteriores luego de reconocer la grave situación energética del país, el reciente anuncio deja en evidencia lo grave de la actual crisis económica que afecta a Cuba, la cual ha sido comparada con la vivida en los años 90 tras la caída de la Unión Soviética.