Hace tres años aproximadamente comenzó la historia de amor entre Orlando Bloom y Katy Perry, cuando ambos participaron en la ceremonia de los Globos de Oro y Bloom tuvo el atrevimiento de robarle la hamburguesa a Katy, hecho que ella nunca toleraría, pero en aquel momento hizo una excepción y terminó en un final de amor.
“In-N-Out siempre ha jugado un papel muy importante en mi vida”, señaló la cantante haciendo referencia al restaurante de comida rápida favorito. “Nos unió una de sus hamburguesas: yo estaba sentada en una mesa con Denzel Washington en la ceremonia y él se acercó y cogió una. Al principio le dije: ‘Quieto ahí’, pero entonces me di cuenta de que era muy guapo y pensé: ‘Bueno, puede quedársela’. Más tarde me lo volví a encontrar en una fiesta y le pregunté qué tal le habían sentado los aros de cebolla. Él me respondió rápidamente: ‘Me gustas mucho’, y el resto ya es historia”.
El pasado 14 de febrero la pareja anunció de manera sorpresiva mediante las redes sociales su compromiso. Perry dio a conocer los detalles de la propuesta que le hizo su novio y que no se mantuvo exenta de contratiempos. Los nervios le jugaron en contra a Orlando y justamente en el instante clave, la cajita con el anillo de compromiso se le quedó atascada en su bolsillo, por lo que tuvo que romper una botella de champán en el acto para finalmente extraerla, pero a pesar de todo el momento fue maravilloso.
“Fue muy bonito. Habíamos planeado ir a cenar y después a alguna exposición, pero en su lugar nos estaba esperando un helicóptero. Me pidió que me casara con él en pleno vuelo. En cuanto aterrizamos, se inició un despliegue de medios digno de una película de James Bond: todo el mundo llevaba puestos audífonos y nos escoltaron hasta una terraza en Los Ángeles donde nos esperaban todos mis familiares y amigos. Lo organizó todo muy bien”, reconoció la artista.
Con información de Vanidades
