Tremenda sorpresa se llevó Kourtney Kardashian cuando descubrió que una de sus empleadas domésticas le había robado dinero además de hackearle sus teléfonos, así lo mostró el más reciente episodio del reality show “Keeping Up With the Kardashian”, transmitido el pasado domingo.
Todo sucedió mientras la empleada se encontraba a solas con los tres hijos de Kourtney, Mason, Penélope y Reign Disick.
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“Esta mujer robó 700 dólares de mi cartera”, le comentó la también empresaria a su hermana Khloé Kardashian y a Stephanie Shepherd, una de sus mejores amigas.
Pero ahí no terminó todo, la mayor de las Kardashian testificó que la empleada también había robado 4 mil 500 dólares a su ex, Scott Disick, y se llevó un iPad que era propiedad de la familia.
“Entonces, mi equipo de seguridad que está aquí dijo que la había visto dos veces con su linterna encendida en la oficina. Ella nunca volverá a venir aquí”, expresó con determinación la fundadora del blog Poosh.
“Está viendo tus mensajes de texto ahora mismo. ¿Está viendo mis mensajes de texto?”, exclamó Kourtney al descubrir por ella misma que la mujer había hackeado sus dispositivos electrónicos.
Rápidamente, se dirigió a la planta baja de su residencia, en la que todavía se encontraba la ladrona. Cuando la empleada se percató de que había sido descubierta, echó a correr y desapareció en su auto.
Kourtney decidió no hacer el reporte a la policía, lo cual no significó que no le diera la importancia que ameritaba este hecho. Con el objetivo de darle mayor protección a sus hijos y a la casa, tomó varias medidas de seguridad, tales como desconectar todos los dispositivos del teléfono, cambiar las contraseñas del celular y de iTunes e, incluso, hacer una limpieza en la casa para alejar las malas energías.
Por notro lado se aseguró de que su asistente tenga más cuidado a la hora de contratar a alguien en el futuro, para lo cual le dio una serie de instrucciones.
“Y para la próxima, hemos aprendido una gran lección”, concluyó.
