Internet celebra medio siglo de existencia y es que desde que se integró a la vida cotidiana cambio drásticamente nuestro modo de vivir, incluso repercutió en nuestra interacción del día a día con los demás.
Actualmente, esta red de telecomunicaciones, después del teléfono, es la más extensa del mundo, sin embargo, solo el 50 por ciento de la población mundial está conectada a internet.
Internet ha revolucionado todo, en cuanto es utilizado para casi todo, desde compartir una imagen con un amigo hasta pedir una pizza o comprar un televisor, incluso hasta hace algunos años para leer un periódico debíamos comprar una edición en papel con noticias del día anterior, pero ahora con un solo clic podemos leer y hasta ver las noticias en tiempo real, y ya no solo a nivel local, sino cualquier periódico de cualquier parte del mundo.
Quien pensaría que hace medio siglo el intercambio de información era entre dos computadoras, y ahora compartimos información con miles de millones de objetos conectados como el televisor, el medidor de luz, el radio, incluso hasta electrodomésticos, haciendo que nuestra forma de trabajar, de comunicarnos y hasta de vivir haya cambiado.
Fue el 29 de octubre de 1969, en California, cuando la universidad de Los Ángeles envió el primer paquete de datos al Instituto de Investigación de Stanford. En los planes debía ser transmitida la palabra “login” (inicio de sesión), pero los informáticos lograron enviar solo las primeras dos letras, luego el sistema se bloqueó.
En ese momento la red recibía el nombre de Arpanet: un proyecto deseado por una agencia del departamento de defensa estadounidense, el ARPA (Advanced research projects agency – Agencia de proyectos de investigación avanzada), que conectaba apenas a cuatro terminales.
Desde ese entonces, la tecnología progresó y la red se expandió hasta convertirse en lo que es hoy.
La web, el ingrediente principal, significó el éxito de Internet, sin embargo, para acceder se necesitó de motores de búsqueda como por ejemplo Google.
Otro elemento sumamente importante fues la “arroba”, símbolo del correo electrónico que nació gracias al programador Ray Tomlinson en 1971. Actualmente, en el mundo se intercambian 293 mil millones de correos electrónicos por día.
El número de objetos conectados continúa en ascenso, ya que, desde lavadoras hasta automóviles, luces del hogar, maquinaria de fábricas, y muchos más, el Internet continúa apropiándose de nuestras vidas que seguramente darán vida a la próxima gran revolución, no sin temor a la privacidad y la seguridad.
Ahora podemos enviar información de un lugar del mundo a otro en segundos, realizar presentaciones online, compartir nuestras vidas a través de fotos, vídeos, sonidos y textos, vivir en un mundo paralelo como nos proponen algunos juegos, pero, sobre todo, compartir nuestra vida real, nuestra identidad auténtica. De esta manera, historias personales se convirtieron en públicas y temas locales se convierten en globales.
Sin embargo, no todo es color de rosa, ya que el desarrollo de internet ha llevado a cuestionamientos y debates sobre el modo en el que la comunicación cibernética afecta las relaciones sociales.
De acuerdo a diferentes medios, existen hasta ahora 26 mil millones de objetos conectados a Internet, y según los analistas, la cifra aumentará a 75 mil millones para 2025, con un impacto económico potencial de 11 mil billones de dólares.
