Albita Rodríguez dijo adiós a Cuba en busca de libertad
La compositora y productora cubana, Albita Rodríguez, cuya música inspirada en lo tradicional y rural de la isla caribeña, la ha convertido en una de las máximas exponentes del ritmo cubano, gracias a su maravillosa voz y esa personalidad única que tanto la distingue.
En abril de 1993, la talentosa cubana decide emigrar al país norteamericano junto con su banda, instalándose en Miami, donde comenzó a realizar pequeñas presentaciones hasta que por fin fue descubierta y de ahí a los escenarios grandes.
Al cuestionarle el porqué decir adiós a Cuba, Albita responde que lo hizo ante la necesidad de encontrarse con ella misma, sin tener que pensar de una manera y tener que estar diciendo otra cosa, además de que buscaba “libertad”, sin embargo, afirma que el proceso no fue fácil
“La adaptación a una nueva cultura, un nuevo idioma; Aprender a ser libre, a no tener miedo, a empezar de cero”.
Además, recalca que gracias a todo ello pudo llevar a su familia cercana.
Durante su llegada a otro país le ayudó, dice, para valerse por mí misma, decidir sobre sus cosas, su vida, “hasta los detalles más pequeños. Asumir mis decisiones, mis caminos y también mis huellas”, manifestó la artista.
De Cuba Albita con gran melancolía afirma: “Cuba está dentro de mí siempre. En mi canto, en todo lo que me rodea. Pero he aprendido a amar a mi nueva Patria, donde he podido desarrollar mis sueños y darle un mundo mejor a mi familia y la Patria se convierte un poco en eso. La Patria es mi compromiso con mi cultura, pero también, con quien nos alimenta.
Alba Mirna Rodríguez Herrera, su nombre verdadero, nació en La Habana el 6 de junio de 1962 y su música ha estado en la banda sonora de películas cómo Mascaró, coproducción española-cubana-venezolana, Café con leche, documental realizado en Miami, The Specialist y Dance with me ambas realizadas en Hollywood.
La cubana ha sido nominada varias veces a los prestigiosos premios Latin Grammy y ha sido ganadora de dos premios por su producción.
Sin duda, Albita es un orgullo para el pueblo cubano, cuyo talento la ha convertido en una digna representante de la música cubana.