Masiva “intoxicación estomacal” impide que peloteros de Industriales jueguen en Las Tunas
Más de una veintena de integrantes del equipo Industriales, entre técnicos y peloteros, se vieron imposibilitados de presentarse a un juego programado para el lunes en la oriental provincia de Las Tunas por una “intoxicación estomacal”.
La información fue confirmada en la noche por el Noticiero Nacional de Televisión, donde precisaron que las autoridades de salud del territorio tunero han obtenido unas cinco muestras clínicas y están llevando a cabo una investigación profunda.
Industriales, el equipo de La Habana, tenía previsto un tope contra la selección de Las Tunas en el estadio Julio Antonio Mella. Después del incidente, el evento fue aplazado para el martes sobre las 10 de la mañana.
En declaraciones al Noticiero, la directora provincial de Medicina Deportiva, Aurora Bruquet, explicó que la “intoxicación alimentaria” pudo haber ocurrido durante el viaje en ómnibus del equipo hacia la provincia tunera.
“A las 10 de la mañana (del lunes) se nos comunicó lo que estaba ocurriendo y nos personamos en el Hotel Las Tunas, donde está hospedado el equipo de Industriales y nuestro equipo provincial. Confirmamos cinco afectos: dos atletas, el médico, el director del equipo Rey, Vicente Anglada y Frank Camilo Morejón”, dijo.
Según detalló, el resto de casos tuvieron lugar “en el transcurso de la madrugada del sábado, que fue cuando llegó Industriales, y otros transcurridos el domingo”.
Francisco Aguilar Román, médico de Industriales y uno de los afectados, confirmó a la televisión que los problemas comenzaron la madrugada del sábado, cuando “distintos miembros del equipo y la dirección amanecimos con cólicos”.
El galeno también identificó otros padecimientos como dolores abdominales y diarrea.
Por otro lado, fuentes cercanas a lo sucedido dijeron al medio especializado Swing Completo que no había agua potable en el hotel donde el equipo se hospedó y que la utilizada para la comida tenía “color tierra”.
Algunos peloteros también se quejaron del olor que expedía la comida que recibieron.