El Consejo de Ministros de Cuba dio a conocer el pasado miércoles la estrategia de recuperación nacional post-coronavirus. Así como, las medidas que se pondrán en marcha de forma gradual, informó la agencia de noticias Efe.
Durante un encuentro con los representes de los órganos gubernamentales, Miguel Díaz-Canel examinó y aprobó un plan de desescalada dividido en tres fases, cuyos detalles serán divulgados este jueves en una emisión del programa de la Mesa Redonda.
“Se ha trabajado intensamente en función de salvar vidas y los resultados nos conducen a vislumbrar que estamos en un momento cercano a pasar a la recuperación”, declaró el mandatario.
Primera fase
Según explicó el primer ministro, Manuel Marrero, la normalización ocurrirá de forma “gradual y asimétrica” para evitar cualquier tipo de rebote. En la primera fase —por ejemplo— se mantendrá el uso de mascarilla en espacios públicos. También habrán determinados cambios en los sectores de la salud, el ámbito laboral y tributario, el comercio exterior y el interior, el transporte, la educación, el deporte y la cultura.
El turismo, específicamente, durante esta fase inicial estará limitado al público nacional. Por lo que este verano no habrá actividades con aglomeraciones, las piscinas abrirán al 30 % de su capacidad y el acceso a las playas será bajo medidas de control.
Con respecto al transporte, Marrero apuntó que se mantendrán las restricciones de entrada y salida del país. Mientras que el transporte público urbano, intermunicipal y rural se restablecerá “con limitaciones”.
Segunda Fase
La entrada de viajeros internacionales —una de las principales vías de ingreso de divisas para el país— no está prevista hasta la segunda etapa del plan de desescalada, estará diseñada en función de la demanda y orientada a los cayos del norte y sur del archipiélago cubano.
Asimismo, los turistas tendrán que someterse a pruebas PCR. Los hoteles, por otra parte, contarán con un sistema de vigilancia clínico-epidemiológica, se limitará la ocupación y capacidad en los servicios gastronómicos y recreativos, y la renta de autos y excursiones. Sin embargo, La Habana, al ser el epicentro del coronavirus en Cuba, será la última región del país en incorporarse al calendario de normalización.
La Isla cerró sus fronteras a finales de marzo y aún no se ha notificado una fecha oficial de reapertura. No obstante, algunas sedes diplomáticas en La Habana han comenzado a trabajar en relación al 1 de agosto como momento tentativo. Sobre todo, porque en los últimos días las altas médicas han superado los ingresos por coronavirus y en casi 11 días no se han registrado decesos.
Hasta el momento, las únicas fechas que se manejan son las del actual ciclo escolar. Se prevé que las clases se retomen en septiembre para su culminación y en noviembre, entonces, se comenzaría el nuevo periodo lectivo. La Educación Superior seguirá con clases y los exámenes de ingreso aplazados, durante las dos primeras fases del proceso de recuperación.
