Un tiroteo acontecido el pasado jueves en una barbería de un centro comercial, cerca del campus principal de la Universidad Internacional de Florida(FIU), en Miami, acabó con la vida de un hombre de origen cubano.
De acuerdo con reportes de medios locales, todo comenzó cuando uno de los clientes del recinto —ubicado a la altura avenida 107 y la calle 8— comenzó a discutir con José Luis Contreras, de 39 años, un babalawo de Hialeah. Los dos hombres decidieron salir hasta el estacionamiento a lo largo de Southwest 8th Street y 107th Avenue. Allí, uno de ellos sacó un arma de fuego y le disparó a la víctima varias veces.
Álvaro Zabaleta, vocero del Departamento de Policía de Miami-Dade, señaló que el antillano fue trasladado de inmediato al Kendall Regional Medical Center pero falleció poco después por complicaciones derivadas a las heridas de bala.
Las autoridades detuvieron a varias personas que se encontraban en la escena del crimen, pero, hasta el momento, no se ha identificado aún al sospechoso. También se emitió un aviso especial con el objetivo de localizar a un SUV Mercedes-Benz blanco que salió a alta velocidad del estacionamiento, pero no se sabe a ciencia cierta si está involucrado en el fatídico crimen.
Familiares y amigos cercanos de Contreras contaron a América Tevé que, hace solo unos meses atrás, la novia de la víctima le había pedido matrimonio.
Las armas de fuego se han convertido en uno de los problemas que más preocupa a los floridianos. Hasta marzo de 2019, Florida —con 2.158.447 licencias— era el estado con más permisos de armas de fuego otorgadas. Esta cifra incluye autorizaciones a jueces (767), funcionarios de prisiones y agentes de la ley en activo (132.954) y de seguridad en colegios (416), entre otros grupos.
