El Gobierno de Uruguay endureció los requerimientos para la tramitación de la residencia permanente, de aquellos inmigrantes extra Mercosur. Una medida que, sin lugar a dudas, afectará a los cubanos quienes —junto a los dominicanos y venezolanos— conforman el 95% de las solicitudes de cédulas de identidad en la nación sudamericana.
De acuerdo con reportes de la revista Búsqueda, tras las modificaciones del Decreto 394/009, a partir de ahora, los aplicantes deberán acreditar ante las autoridades tener ingresos mensuales de aproximadamente 26.800 pesos.
Una cifra muy superior al salario mínimo del país que se encuentra entre los 16.300 pesos.
No obstante, fuentes de la Dirección Nacional de Migración en Montevideo indicaron a El País que las autoridades no serán tan “rígidas” con el número y por consiguiente, se aceptarán solicitudes de personas con salarios cercanos a los 26 mil pesos.
La decisión —señala el diario español— forma parte de un conjunto de medidas desplegadas por la administración de Luis Lacalle Pou, en conjunto con el Ministerio del Interior, para endurecer el criterio de elegibilidad a la hora de otorgar cédulas de identidad a extranjeros. Por otra parte, las organizaciones no gubernamentales en Uruguay no han recibido de buena gana la normativa.
Diversas entidades aseguran que la medida hará más complicado aún la regularización de los migrantes y frenará las solicitudes de refugio, que aún se encuentran pendientes.
Cifra de migrantes cubanos en Uruguay
Si bien en febrero del presente año Lacalle Pou dijo estar dispuesto a recibir cubanos y venezolanos —por tratarse de ciudadanos expulsados de sus propios países—, el gobierno derechista ha comenzado a mostrar cierta preocupación con el masivo arribo de antillanos a sus fronteras. La ola migratoria, al parecer, se ha acrecentado tras la crisis sanitaria desatada por el coronavirus.
Pese al cierre de fronteras, a finales de junio se registró el arribo de 1.823 extranjeros —83 cubanos— al territorio uruguayo provenientes de “zonas de riesgo”.
En 2019 Cuba fue el país que más inmigrantes aportó a la nación sudamericana con 5.695 ciudadanos y 9 mil solicitudes de refugio, para un promedio de 33 ingresos por días.
