“Alarmante” número de personal médico en EEUU se niega a vacunarse contra el COVID-19
Un número “alarmante” del personal de salud de EEUU se estaría negando a colocarse la vacuna contra el COVID-19, a pesar de que son los primeros en la fila para recibirla.
Así lo reseña un artículo de The New York Post el cual cita varios estudios que reportan que trabajadores de la salud de varias instituciones médicas del país no quieren colocarse la cura contra el virus que ha dejado miles de muertos en ese país y 20 millones de infectados.
En ese sentido, precisa que esta semana el gobernador de Ohio, Mike DeWine informó que, al menos el 60% del personal de salud de ese estado de EEUU que trabaja en hogares de ancianos se ha negado a recibir la vacuna contra la COVID-19.
De igual manera, el reporte del Post indica que, “más de la mitad de los trabajadores de EMS de la ciudad de Nueva York han mostrado escepticismo” con respecto a la cura contra la pandemia.
Asimismo, en Texas y California se está registrando un incremento en la tasa de rechazo del personal de salud de esos estados de EEUU contra la vacuna de COVID-19.
“Se estima que el 50 por ciento de los trabajadores de primera línea en el condado de Riverside en el Golden State optaron en contra de la droga, informó Los Angeles Times, citando a funcionarios de salud pública”, indica el reporte.
Personal médico se niega a vacunarse
Según explicaron, la principal excusa que ponen los trabajadores de la salud en EEUU para colocarse la vacuna contra el COVID-19 es que la cura ha estado muy vinculada con la política.
En el hospital Elizabeth Community de California, más de la mitad del personal de salud elegible para recibir la cura no lo hicieron.
Por su parte, un médico del Houston Memorial Medical Center afirmó que, la mitad de las enfermeras de ese centro no quiso recibir la vacuna contra la COVID-19 “por razones políticas”.
De igual forma, se precisa que no solo parte del personal de la salud está en contra de la vacuna contra el COVID-19 en EEUU, sino que en la población en general también hay un porcentaje de personas que se rehúsan a utilizar la cura para prevenir la enfermedad.