Una de las parejas más mediáticas de todo Hollywood puso punto final a su relación. La socialité y reina de los reality show, Kim Kardashian, oficialmente solicitó el divorcio al rapero Kanye West tras diez años de relación y seis de matrimonio.
Si bien —por el momento— se conocen pocos aspectos de la separación, dígase el acuerdo sobre la custodia de sus cuatro hijos, otros detalles como los bienes compartidos aún no son públicos. Específicamente, el destino final de todas las joyas que el músico le regaló a la empresaria en los años que estuvieron juntos.
De acuerdo con reportes de la revista People, la millonaria pareja tiene un acuerdo prenupcial que dicta qué propiedades se quedarán cada uno de ellos.
Las joyas más emblemáticas de Kim Kardashian
Vale recordar que en octubre de 2013, para el cumpleaños de Kardashian, West alquiló el estadio de los Giants de San Francisco y le pidió matrimonio con un solitario de 15 quilates, que él mismo había diseñado junto a Lorraine Schwartz. El super diamante, de corte ovalado, estaba engarzado en un sencillo aro de oro decorado con pequeños diamantes y el nombre de su primera hija North. Esta alianza está valorada en, nada más y nada menos, que 4 millones de dólares.
Por si fuera poco, en 2016 el rapero le presentó una versión “mejorada” de anillo de compromiso. De nuevo en colaboración con la diseñadora Lorraine Schwartz, el artista pensó una joya con un diamante de 20 quilates con corte esmeralda, uno de los más clásicos. Pese al mayor tamaño, su valor se estima entre los 1.5 y 2 millones de dólares.
Lamentablemente, y para el horror de la pareja, la pieza fue robada en París ese mismo año, cuando la empresaria sufrió un atraco en un hotel. Desde entonces, Kim no ha vuelto a lucir tan alegremente sus joyas más valiosas ni a presumirlas en redes sociales.
Las razones detrás del divorcio
Al sol de hoy continúa siendo un misterio la causa exacta detrás de la ruptura Kim y Kanye. No obstante, todo apunta que la fallida carrera presidencial del intérprete pudo haber sido la gota que derramó el vaso.
El controversial cantante anunció el 4 de julio su postulación como candidato independiente, bajo su propio partido de nombre “BDY” o “Birthday” (cumpleaños, en inglés). Durante su primera campaña política en Carolina del Sur, el artista, de 43 años, se pronunció en contra del aborto y reveló —entre lágrimas— haber pensado interrumpir el primera embarazo de Kim.
“Casi mato a mi hija”, dijo sollozando West, quien se subió al escenario del Exquis Event Center, en North Charleston, con un chaleco antibalas. “Entonces, incluso si mi esposa se divorcia de mí después de este discurso, trajo a North al mundo, incluso cuando yo no quería (…) Se puso de pie y protegió a ese niño”.
