Fallece enfermera cubana en La Habana tras recibir tres dosis del candidato vacunal Abdala
Desde Cuba denuncian el fallecimiento de una enfermera residente en la provincia de La Habana tras recibir la tercera dosis del candidato vacunal Abdala.
Según confirmó en una publicación de Facebook el médico especialista en Fisiatría, Miguel Ángel Ruano Sánchez, la enfermera Bárbara López trabajaba en el Centro Nacional de Rehabilitación ‘Julio Díaz’ en Fontanar, municipio de Boyeros y participaba como voluntaria en el estudio del “candidato vacunal”.
Asimismo, el profesional precisó que López tenía solo un riñón funcional, condición que las autoridades sanitarias pasaron por alto al momento de inocularle el inmunógeno cubano, aún sin avalar por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Según la información difundida en la citada red social, el caso de la cubana fue cerrado tras su inesperada muerte como: Neumonía, shock séptico y paro cardiorrespiratorio.
Por su importancia la redacción de Asere Noticias reproduce íntegramente la denuncia del médico isleño:
Fallece inesperadamente (con presunto diagnóstico de Neumonía) enfermera del Centro Nacional de Rehabilitación Julio Díaz de Fontanar, Boyeros en La Habana que participaba como voluntaria en el estudio del “candidato vacunal” (Abdala).
A los pocos días de ponerle la 3ra dosis de dicho “candidato vacunal” y contagiada presumiblemente de COVID-19 (sin confirmar) luego de ser vacunada totalmente con esquema completo, por lo que por conveniencia cerraron su caso post morten como Neumonía, shock séptico y paro cardiorrespiratorio.
Precisamente cuando el gobierno de Cuba irresponsablemente declara un 92.28% de eficacia de su “candidato vacunal” (Abdala) sin concluir el supuesto ensayo clínico pues aún no le han puesto la 3ra dosis del esquema a muchos voluntarios que no fueron seleccionados siguiendo requisito alguno y si solo apelando a su “voluntariedad” como ha sido denunciado en redes en más de una oportunidad y como es el caso de mi antigua compañera de trabajo en el Centro Nacional de Rehabilitación Julio Díaz de la Habana la enfermera Bárbara López, el final de muchos como ella con ese candidato vacunal no ha sido el mejor.
Bárbara López enfermera de ese centro (abajo en la foto como en esas instantáneas que son necesarias para contar historias, mostrando su esquema completo de vacunación a solo instantes de ser inmunizada con su 3ra dosis de (Abdala) en ese centro el Julito Díaz). López vacunada recientemente con la 3ra dosis de Abdala ha fallecido en La Habana con diagnóstico de Neumonía.
La enfermera López se desempeñaba en la atención a pacientes con Covid 19 en ese centro de hospitalario y unidad asistencial adaptada desde hace poco más de un año para atender a pacientes contagiados con coronavirus en Boyeros el municipio habanero, más su condición de tener solo (un riñón funcional) no fue al parecer motivo a tener en cuenta para que no solo (no se le ubicara) en esa línea de atención con tanto riesgo para su salud, sino además para que (no fuera incluida) como voluntaria para recibir las 3 dosis de (Abdala) un experimento en el que debieron participar personas sin comorbilidades inicialmente y con algunos otros criterios de selección que en su caso no se cumplieron.
En más de una ocasión a la jefa de enfermera de esa unidad asistencial dónde se desempeñaba la enfermera López la misma le pidió que por favor no la expusiera de esa manera al riesgo de contagio teniendo en cuenta que ella solo tenía un riñón en funcionamiento, pero no hicieron caso a los requerimientos y pedidos de mi excompañera Bárbara y como resultado a los pocos días de ponerse la 3ra dosis del candidato vacunal (Abdala) todo parece indicar se enfermó de “Neumonía” según reporte médico pues en Cuba solo algunos mueren de Covid-19, otros fallecimientos los cierran como por afecciones respiratorias disímiles como parece ser el caso de la enfermera Bárbara López, mal seleccionada para desempeñarse en esa línea de atención tan riesgosa en este momento y mal seleccionada para voluntaria en un estudio para una vacuna que no demuestra aún su verdadera eficacia y tampoco consecuentemente los posibles efectos colaterales o adversos en la población que presuntamente participa en el “estudio”.
Una triste historia que es mi deber compartir con ustedes por lo sentida que es para mí y mis excompañeros allá en Cuba que son la fuente de toda la información que les he expuesto acá.
EPD querida amiga y compañera
