El colapso histórico de las acciones de Meta esta semana eliminó $31 mil millones de la riqueza personal de Mark Zuckerberg, derribándolo tres lugares en la lista de Bloomberg de las personas más ricas del mundo.
Ahora ocupa el décimo lugar en el Índice de multimillonarios de Bloomberg, detrás del cofundador de Oracle (ORCL), Larry Ellison, y solo unos cientos de millones de dólares por encima del empresario indio de energía a tecnología, Mukesh Ambani, El CEO de Tesla (TSLA), Elon Musk, encabeza la lista por un amplio margen, reseña CNN.
Meta Platforms, la compañía anteriormente conocida como Facebook (FB), tuvo su peor día en el mercado de valores el jueves, luego de informar una disminución de ganancias inusual y un número de usuarios estancado, y brindar una evaluación vaga de las perspectivas de la compañía a medida que invierte fuertemente en tecnología aumentada y realidad virtual.
“Esta visión completamente realizada aún está lejos”, dijo Zuckerberg en una llamada con analistas. “Y aunque la dirección es clara, nuestro camino por delante aún no está perfectamente definido”.
Las acciones de la compañía cerraron con una caída de más del 26%, lo que redujo su valor de mercado en casi 240.000 millones de dólares.
Zuckerberg, de 37 años, posee más de 398 millones de acciones de Meta, o el 14,2 % de la empresa, según un documento de la SEC de febrero de 2021, el informe más reciente disponible.
Tras el accidente, el CEO y cofundador ahora tiene un valor de $89.6 mil millones, solo $400 millones más que Ambani, quien controla Reliance Industries y es el hombre más rico de Asia, según el ranking de Bloomberg.
Además de un desastroso informe de ganancias, Meta reveló por primera vez cuánto dinero está gastando en su cambio al metaverso. La compañía también informó una disminución leve pero sorprendente en los usuarios activos diarios de Facebook en los Estados Unidos y Canadá en comparación con el trimestre anterior.
El jueves fue un recordatorio de cuán grande se ha vuelto Meta. Su capitalización de mercado disminuyó en una cantidad mayor que la valoración de la mayoría de las empresas públicas, incluidas Oracle y Cisco (CSCO). La pérdida también fue casi tan grande como el valor total de Disney (DIS).
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