Las autoridades del Aeropuerto Internacional de Miami anunciaron que esta contará por primera vez con su propia terminal privada.
De acuerdo con un comunicado compartido por las autoridades del aeropuerto la semana pasada, esta llegará en 2025 y estará a cargo de PS, anteriormente conocida como The Private Suite, encargada de brindar servicios de terminales privadas para vuelos de lujo.
Esta terminal privada estará en la sede regional de Pan American Airways, un edificio de dos pisos que será restaurado por el famoso arquitecto Richard Heisenbottle, quien tendrá la tarea de renovar el lugar mientras preserva la importancia histórica del conocido edificio 874.
El aeropuerto señala que la terminal ofrecerá unos 19.500 pies cuadrados de espacio alquilable, de igual manera, los pasajeros podrán saltarse las terminales principales y disfrutar de varios lujos mientras son conducidos directamente a sus aviones.
La terminal privada ofrecerá también múltiples opciones gastronómicas, bares, salas de reuniones y otros lujos como spas que mejorarán la experiencia de cada viaje. De igual manera, contará con suites privadas con balcones, en donde se proporcionarán servicios de control de TSA y Aduanas y Protección Fronteriza de EEUU (CBP, por sus siglas en inglés).
Este servicio será similar al que se ofrece en otros aeropuertos del país, como en el de Los Ángeles, California, el de Teterboro, cerca de Nueva York y el aeropuerto ejecutivo de Miami-Opa Locka, también en Florida.
Un servicio de terminal privada en los aeropuertos es una instalación exclusiva y personalizada diseñada para brindar comodidad y conveniencia a pasajeros selectos.
A diferencia de las terminales públicas convencionales, que atienden a un gran número de viajeros, las terminales privadas están reservadas para un grupo limitado de personas, como clientes de aerolíneas de lujo, ejecutivos de alto nivel, celebridades u otros individuos que buscan una experiencia de viaje más exclusiva.
Expansión del aeropuerto de Miami
Desde el 2019, se anunció que el Aeropuerto Internacional de Miami iba a tener una ampliación que demoraría entre cinco y 15 años en completarse, misma que tendría un costo de entre 4 y 5 millones de dólares.
Esta ampliación planteó la construcción de dos hoteles que conectarán directamente con el sistema de trenes de MIA Mover y con las terminales de vuelo del aeropuerto.
Entre los cambios propuestos, también se encontraba la rehabilitación total de la Terminal Central, cuyos techos serían elevados para mejorar la iluminación. A su vez, se planeaba ampliar las áreas de facturación y los puntos de control de seguridad.
