La influencer cubana Aly Sánchez compartió en redes los placenteros días que pasó junto a su ahora esposo Roberto Balmaseda de luna de miel en Grecia.
La pareja escogió este místico y hermoso país para celebrar su amor, y desde su boda en Miami han compartido en redes sociales cada paso de su viaje.
En una movida inusual, Aly no decepcionó a sus seguidores, al llevar a su “amiga” Migdalia Rondón a su increíble travesía, un personaje humorístico que la ha lanzado a la fama en la ciudad del sol.
Los recién casados hicieron una escala de 24 horas en Atenas, donde vivieron un “cambio de horario descomunal”, y aunque hubo mucho frío, Sánchez señaló que “valió la pena”.
La pareja posteó fotografías de unos paisajes hermosos, tanto de la vida rural, como de la metrópolis griega.
Su viaje continuó hasta Mykonos, donde hicieron otra parada magnífica, y dieron una muestra del gran amor que se tienen.
“Ojalá el amor sea la próxima pandemia”, dijo Aly junto a una fotografía al lado de Roberto al atardecer.
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La pareja dio un paseo, disfrutó de la comida típica, y aprovecharon para estar a solas, construyendo recuerdos de su paso por una de las zonas más antiguas e icónicas del viejo continente.
Días después, la cubana llegó a la célebre y bella Santorini, para continuar con su luna de miel por todo lo alto.
Allí disfrutó a lo grande, con viajes en velero por el mar, bailando con música cubana, llevando a Grecia el toque tropical, y haciendo que Migdalia alegrara a sus amigos de vez en cuando.
La influencer recalcó el gran amor que le tiene al padre de sus hijas, y lo feliz que la hizo poder compartir ese viaje tan especial con él.
“Llevamos 14 años como una locomotora. Sin parar. Creo que ha sido un viaje merecido. Vimos tantos atardeceres y con ellos la sensación de felicidad no tiene precio. Perdón por soltarlos por unos días, nos hacía falta no pensar en nada. Hemos aprendido durante estos años que la vida es corta y no espera”, escribió en sus redes sociales.
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En su última foto, antes de despedirse de los encantos de la tierra del Olimpo, escribió en sus historias, “Que todas mis lunas sean lunas de miel”.
Sánchez se despidió agradeciendo a los que hicieron posible ese sueño, que logró ser más hermoso de lo que esperó, según ella misma.
