La cantante estadounidense Britney Spears, quien recientemente ha regresado al estrellato tras colaborar con Elton John en su tema Hold Me Closer, se negó a ser entrevistada por la legendaria presentadora Oprah Winfrey.
Tras librarse en 2021 de la tutela legal que su padre, Jamie Spears, mantuvo sobre ella por más de 13 años, la intérprete de Everytime se ha desahogado en varias ocasiones de los traumas que enfrenta a raíz de los abusos que vivió.
Su principal medio para hacerlo había sido su cuenta de Instagram, donde contaba con millones de seguidores, pero decidió cerrarla la semana pasada, en medio del estreno de su primera canción en seis años, junto al mencionado cantante británico.
Tras esto, una “fuente cercana” a la cantante dijo a la revista People que la ‘Princesa del Pop’ estaba “en pláticas” con la célebre presentadora, para una entrevista íntima, al estilo de la que tuvo el año pasado con el príncipe Harry y Megan Markle, duquesa de Sussex.
Aunque la expectativa de los fans era mucha, pues Oprah es conocida y querida entre el público por la humanidad, respeto y honestidad con que trata a sus entrevistados, todo apunta a que Britney decidió rechazar la oferta,
En medio de los rumores sobre la entrevista, la artista publicó un audio de 22 minutos a través de su cuenta de Twitter, donde habló llanamente sobre los abusos que vivió como parte de su tutela, por parte de su padre, de su madre, su hermana, y su manager.
Entre las cosas que mencionó, Spears aclaró que se le ofreció una gran suma por compartir su historia con Oprah, pero que no se sentía cómoda con lucrar con la “exclusiva” de su historia, pues su verdad no era algo de lo que quisiera sacar dinero.
Britney declaró que era “un poco tonto” que le pagaran por decir la verdad, además de que está “asustada por los juicios y el escepticismo” con el que sería recibido su relato.
La relación de Spears con la prensa formal está sumamente deteriorada luego de los años de acoso y juicios que sufrió por parte de la misma a inicios del milenio, además de que, en gran parte, fue esta mala relación la que facilitó que sus padres pidieran la tutela legal cuando en realidad ella no enfrentaba adicciones, enfermedades mentales, ni discapacidades de ningún tipo.
“Honestamente, hasta el día de hoy, no sé realmente que fue lo que hice para merecer esto (…) El alcance de mi ‘locura’ fue jugar a que me corretearan los paparazzi, que es una de las cosas más divertidas que hice siendo famosa, así que no entiendo que fue tan dañino sobre eso”, expresó en una parte del audio.
Britney Spears holds the most valuable story in Hollywood and instead of going on Oprah and getting paid millions, she leaked a 20 minute voice memo, telling her story in her own words.
She ended it by telling her fans: “you are not alone.” 🥺 #ThankYouBritney
— Josh Helfgott (@JoshHelfgott) August 29, 2022
La prensa estadounidense -y por extensión mundial- juzgó a Britney por su peso, por su canto, por sus actuaciones, por la manera en que se le vendía como un objeto sexual, por salir de fiesta, por ser mala madre, y luego por estar estresada, en un momento en que era monitoreada las 24 horas del día, incluso cuando estaba con sus hijos.
En ese sentido, es entendible que no quiera tratar con medios o reporteros formales, y que busque seguir en la libertad de decir lo que siente y piensa, de su propia boca, y sin regulaciones externas.
“Creo que es crucial para mi corazón y mi cabeza, ser capaz de hablar abiertamente sobre esto, como si fuera alguien más quien lo hiciera”, sentenció Britney.
Por último, cerró el audio -que borró poco después- explicando que hablaba también para que su relato pudiera ayudar a “cualquiera que se sienta solo”.
