Solo cuatro semanas después de anunciar su divorcio de Offset, la actriz y rapera estadounidense Belcalis Marlenis Almánzar, mejor conocida como Cardi B, confirmó el pasado jueves que le dará otra oportunidad a su matrimonio.
A finales de septiembre, la intérprete de “WAP” solicitó el divorcio en una corte de Atlanta, estado de Georgia, alegando “diferencias irreconciliables”. La artista hizo saber sus intenciones de pedir la custodia física legal y primaria de la pequeña Kulture y una división equitativa de sus bienes matrimoniales. También exigió que su exesposo se hiciera responsable de la manutención de su hija, así como los honorarios del proceso legal.
Las dos estrellas, incluso, tenían fijada para el venidero 4 de noviembre su primera comparecencia ante el tribunal.
Sin embargo, las cosas tomaron un nuevo rumbo después de la polémica fiesta de cumpleaños de Cardi. Tras la celebración comenzaron a circular fotos de los raperos besándose lo que levantó una oleada de suposiciones.
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Para poner fin a toda la ensarta de rumores, Cardi B decidió pronunciarse al respecto. En una reciente entrevista concedida al portal especializado TMZ, la cantante reconoció no haber meditado “correctamente la decisión —de divorciarse— y siguió adelante sin pensar en las consecuencias”.
“Un día estoy feliz y al día siguiente quiero pegarle”, confesó. “Luego empiezo a echarle de menos otra vez. Es realmente difícil no poder hablar con tu mejor amigo”.
Asimismo, aclaró que este “bache” que ha vivido de manera pública su familia no es ninguna maniobra publicitaria.
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