Casi 7.000 cubanos entraron a EEUU en marzo, la mayoría por Florida
Cifras oficiales compartidas por la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras de EEUU (CBP, por sus siglas en inglés) revelaron que casi 7.000 cubanos ingresaron a los Estados Unidos durante el mes de marzo, alcanzando un promedio de 219 personas al día.
Sin embargo, a diferencia de meses anteriores, el 70% de estos ingresos se llevaron a cabo de manera legal a través del estado de Florida, donde 4.864 personas arribaron, posiblemente, con ayuda del parole humanitario.
1.264 de estos cubanos arribaron por el estado de Texas, mientras que 323 ingresaron por California, 134 por Arizona y dos por Nuevo México.
Estas cifras revelan que la cantidad de cubanos que ingresa a través de los estados fronterizos disminuyó en comparación con meses anteriores, cuando miles de antillanos cruzaban a EEUU de manera ilegal.
Por su parte, las autoridades fronterizas que vigilan la costa de Florida indicaron que solo 119 cubanos arribaron como balseros. El número es menor que los registrados durante febrero, y casi una décima parte de los 1.179 que se llegaron a registrar a inicios de 2023.
El CBP señala que 13 de los cubanos que ingresaron al país en marzo eran menores de edad no acompañados, mientras que otros 22 viajaban bajo la custodia de un familiar.
Con 6.817 personas, la Mayor de las Antillas terminó como el octavo país que más migrantes envió a los Estados Unidos.
Por su parte, México se llevó el primer lugar con 82.219 personas, seguido por Colombia, con 17.491; Venezuela, con 15.958; Guatemala, con 15.368; Honduras, con 13.511; India, con 9.648 y Ecuador, con 7.030 personas.
Nuevo plan migratorio
El senador cubanoamericano y presidente del Comité de Exteriores del Senado, Bob Menéndez, presentó recientemente un plan para gestionar la migración y reducir “la presión sobre la frontera suroeste de EEUU”.
De acuerdo con el medio de prensa Radio Martí, la propuesta de Menéndez busca asegurar la frontera sin sacrificar “las obligaciones domésticas y legales con los solicitantes de asilo”.
El funcionario reconoció que para ello, se requiere un enfoque integral “que reconozca las condiciones de cada país que impulsa la migración”.
La propuesta se enfoca en cuatro puntos, crear nuevas vías legales para los migrantes, expandir la asistencia humanitaria en América Latina, incrementar los recursos disponibles en la frontera con México y aumentar los esfuerzos para acabar con el tráfico humano y de drogas.
“Este plan incluye en gran medida políticas que el presidente Biden puede llevar a cabo sin el Congreso, hasta que los republicanos decidan trabajar con la administración para abordar el desafío actual”, agregó.
El funcionario espera que este nuevo plan sea implementado, pues, a su parecer, las políticas migratorias habilitadas por la administración de Biden a inicios de año son medidas “a corto plazo”.