Clara Cabrera se declara “en bancarrota” para no pagarle 1.8 millones a Otaola

La influencer cubana Clara Cabrera, mejor conocida en redes sociales como ‘Clarita La Magnífica’, encontró una manera de eludir la deuda que mantiene con el youtuber Alexander Otaola, al declararse oficialmente en bancarrota.

A través de redes sociales, la cubana oficialista anunció que se declaró formalmente en bancarrota, con lo que pretende evitar el pago de 1.8 millones de dólares que le debe a Otaola, luego de haber perdido una demanda en su contra en octubre del año pasado.

En 2023, Otaola recurrió a los tribunales para pelear legalmente contra la vocera del régimen, acusándola de difamación por todos los comentarios negativos y usos no autorizados de su imagen que ella hacía en sus videos de YouTube y sus redes sociales.

Cabrera incluso creó un grupo de Facebook exclusivamente dedicado a atacar a Otaola y a los patrocinadores de su canal, por lo que la suma se acordó para “resarcir los daños” morales causados al también candidato a alcalde de Miami-Dade.

A unos meses de la conclusión del litigio, Cabrera usó su canal de YouTube, Zona Cero Pódcast, para revelar que la decisión de declararse en quiebra fue posible gracias al apoyo financiero de sus seguidores.

Durante la transmisión, Cabrera volvió a hablar de Otaola -pese a haber prometido al juez no volver a hacerlo – criticando que, según ella, él utilizó la disputa entre ambos para aumentar su audiencia durante los últimos cuatro años.

En el mismo programa, entrevistó a José Pacheco, un inmigrante cubano residente en Massachusetts, quién relató su propia experiencia con la bancarrota, aclarando que no es abogado, pero que habla desde la experiencia de haber enfrentado un proceso similar.

Pacheco explicó que, en su caso, preparó su solicitud de bancarrota apoyándose en un servicio en línea, que lo guio durante el proceso.

“Tuve que responder un cuestionario muy detallado y luego presentar personalmente la solicitud ante la Corte”, relató.

Aunque Pacheco no contó con un abogado, aconsejó a quienes consideren este camino que contraten uno, por la complejidad y el desgaste del proceso. También recalcó que la declaración de bancarrota implica la eliminación total de las deudas, liberando al deudor de cualquier responsabilidad legal sobre ellas.

“Es ilegal bajo la ley estatal acosar a un deudor en bancarrota o cuya deuda ha sido perdonada, ya sea a través de llamadas telefónicas, publicaciones en redes sociales o cualquier otro medio de contacto”, afirmó Pacheco.

Al cerrar el show, Cabrera reiteró que no tiene intenciones de pagarle los daños morales a Otaola, aunque lo dice la corte.

“Gracias a Dios, con el apoyo de mis seguidores, ya estoy declarada en bancarrota. Estoy en la mitad del proceso, lo que significa que no tendré que pagarle los 1.8 millones de dólares a Alexander Otaola, ni ahora ni nunca”.

De momento, Otaola no ha hecho ninguna declaración sobre el asunto, y tampoco se sabe si planea recurrir nuevamente a las leyes para obtener el pago que le deben.