Cubana en Matanzas regala nasobucos a sus vecinos con bellos detalles de confección
Una cubana de nombre Wanda Hernández confecciona nasobucos con lindos “detalles”, los cuales regala a sus vecinos en la ciudad de Matanzas en medio de la pandemia del coronavirus en la Isla.
Wanda desde su casa, ubicada en la calle Media de Matanzas, cuelga un cartel donde anuncia el ofrecimiento gratuito de sus nasobucos luego de que el gobierno cubano exhorto a sus habitantes a que fabricaran ellos mismos sus medios de protección, ante la evidente ausencia de estos en los establecimientos sanitarios.
Esta ciudadana cubana, cada día fabrica un centenar de mascarillas, pero no solo los hace para proteger a la vecindad del contagio, sino que también se ha empeñado en darles ciertos detalles. Para fundamentar dicha iniciativa, cita al escritor Dostoievski, que aseguraba que la belleza podría salvar al mundo.
Debido al rápido crecimiento del número de contagiados y ante la demanda del uso de los nasobucos, Wanda tuvo que pedir ayuda a su suegra para cubrir un pedido del personal médico que realiza las pesquisas en el barrio.
La posibilidad de que Wanda pueda fabricar esta mascarilla también es gracias a las prendas que le regalan alguno de los vecinos, quienes se han unido para que la población se pueda proteger.
Por otra parte, Hernández cree que las personas deben sentirse a gusto con esa protección, ya que la afinidad por el toque artístico puede haberla heredado de su padre, el pintor Manuel Hernández.