Cubano envía carta al Senado español solicitando “Ley de Nacionalidad más justa”
El cubano David Martínez Ruiz escribió una carta dirigida a la presidenta del senado español Senado, Pilar Llop. En la misiva solicita incluir en la nueva Ley de Nietos a descendientes de españoles, que residieron en la Isla en 1898 y no ratificaron la decisión a su nacionalidad.
“Le pido en calidad de presidenta del senado español ser una aliada y, más que una aliada, a ser partícipe de una ley más integral y amplia de aquellas personas que como miles de cubanos, desean obtener lo que aquellos abuelos/as españoles, salidos de sus tierras por diferentes motivos hubieran deseado”, expresó.
La petición, publicada en el portal Españoles de Cuba, hace mención del artículo IX del Tratado de París, que marcó el desenlace del conflicto cubano-español y el final de las guerras por la independencia. El documento, a su vez, obligó a varios ciudadanos ibéricos a dejar atrás su nacionalidad.
Martínez Ruiz, bisnieto de un español natural de la región de Galicia, basó su petición en el “derecho de sangre” y en la necesidad de una “Ley de Nacionalidad más justa e integral”.
De suma importancia, sobre todo, si se considera que el número de españoles residentes en Cuba aumenta cada año, gracias a la Ley de Memoria Histórica de 2006. Datos oficiales —del Instituto Nacional de Estadística de España— apuntan que en 2019, vivían en la Isla cerca de 145.167 ciudadanos españoles. Casi 5 mil personas más que en 2018.
Esta cifra, a su vez, podría sufrir un considerable aumento luego de que Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y Unidas Podemos acordaron, el pasado 2 de enero, reconocer la nacionalidad a todos aquellos descendientes de españoles, nacidos en el extranjero en cualquier momento.
El objetivo es que los interesados puedan “optar por la nacionalidad española en caso de que sus madres, padres, abuelas o abuelos adquirieran la nacionalidad del país de acogida”. A esto también se añaden los casos de quienes perdieron la nacionalidad por estar en exilio durante la Guerra Civil y la dictadura.
A continuación reproducimos de forma íntegra la carta
Mi nombre es David Martínez Ruiz, soy cubano y bisnieto de español, de Puentes de García y Rodríguez, La Coruña, Galicia. Mi abuelo Manuel García Rodríguez, vivió y murió acá en Cuba, como muchos españoles que emigraron a nuestra tierra en búsqueda de prosperidad y mejoras, y a su vez una tierra tan ligada, en todos los sentidos a España, por los lazos que nos unen, como lo expresara su majestad Felipe VI en la reciente visita realizada a Cuba.
Aquí los cubanos, mantenemos costumbres y arraigo que nuestros abuelos, nos dejaron de su cultura, costumbres y experiencias, muchos murieron con el recuerdo de sus familiares dejados atrás en la madre patria, y que nunca más volvieron a ver.
Casi durante dos siglos, ciudadanos y ciudadanas españoles debieron emigrar forzadamente del territorio español por cuestiones económicas y/o políticas. Sin embargo, ese exilio acuciado por el miedo y el hambre no impidió el mantenimiento de fuertes lazos entre España y los exiliados y sus descendientes que tuvieron y tienen una visible impronta en las colectividades de emigrantes en los países de acogida. Esos descendientes de emigrantes se muestran fuertemente vinculados a sus raíces y se enorgullecen de su identidad. Por más satisfacciones que se hayan obtenido en los países de destino, la expatriación, el destierro forzado y el siempre doloroso desarraigo marcaron las vidas del colectivo emigrante y continúan haciéndolo en sus descendientes.
Muchos fueron obligados por el artículo IX del Tratado de París, a dejar de ser españoles, por falta de insuficiente información de aquellos años, muchos no declararon el deseo de mantener esa ciudadanía y por temor a un conflicto bélico mayor con los Estados Unidos de Norteamérica, el reino español aceptó dicho tratado olvidando así a sus ciudadanos en Cuba.
Pero la necesidad de una Ley de Nacionalidad más justa e integral, y así declarada en el acuerdo 5.10 firmado entre el PSOE y Unidas Podemos, del Gobierno en coalición progresista, con el objetivo de resarcir las heridas causadas, por la Ley de Memoria Histórica y que tantos desagravios y divisiones trajo a la familia, por ello nos obliga a hacer reflexiones y análisis más integrales y no poner más trabas a lo que es un hecho, el derecho que tenemos todas las personas a decidir si queremos ser Españoles o no, o lo que es igual el derecho de sangre.
Por lo tanto le pido en calidad de presidenta del senado Español, ser una aliada y más que una aliada a ser partícipe de una ley más integral y amplia de aquellas personas que como miles de cubanos, desean obtener lo que aquellos abuelos/as españoles, salidos de sus tierras por diferentes motivos hubieran deseado.
Mis más sentidas gracias a usted y al grupo de senadores los cuales usted representa, por el arduo y complicado trabajo al que se enfrentan, para hacer de España un país más digno y ejemplar.
Además si es posible, haga llegar a estos senadores y grupos de partidos políticos, este sentir no solo de cubanos, sino de personas que se sienten verdaderos españoles sin tener un documento que los acredite y que esperan de ellos el reconocimiento de nuestros derechos, como descendientes de Españoles.
David Martínez Ruiz