Cubanos que lleguen a EEUU, México o Panamá de manera ilegal no podrán optar por el nuevo sistema de visas
Luego de que este jueves se anunciaran nuevas medidas para reforzar el control en la frontera de México con Estados Unidos, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) reveló que aquellos migrantes cubanos que ingresen a Panamá, México o EEUU de manera irregular, no podrán ser elegidos para el nuevo sistema de visas que implementó la administración de Joe Biden.
El comunicado oficial señala que la nueva estrategia de control tiene por objetivo una recepción ordenada y segura de los migrantes que deseen solicitar una de las 30.000 visas mensuales que se planea entregar a cubanos, nicaragüenses, venezolanos y haitianos.
“Individuos que ingresan a los Estados Unidos, México, o Panamá sin autorización después del anuncio de hoy generalmente no serán elegibles para estos procesos. Estos procesos permitirán que hasta 30,000 ciudadanos calificados por mes de estos cuatro países residan legalmente en los Estados Unidos por hasta dos años y reciban permiso para trabajar aquí, durante ese período”, se lee en el comunicado.
Por otro lado, si los migrantes insisten en ingresar a EEUU pese a esto, serán devueltos de manera inmediata a México.
Al respecto, el Gobierno de EEUU señala que la expansión de este programa dependerá de que las autoridades mexicanas tengan la voluntad de recibir a los migrantes indocumentados de vuelta en su frontera
“También responde a una solicitud del Gobierno de México de proporcionar vías legales adicionales para los migrantes, y promueve los intereses de ambos países de abordar los efectos en todo el hemisferio del deterioro de las condiciones en estos países”, añade el comunicado oficial.
¿Cómo se puede obtener una de las 30.000 visas ofrecidas al mes?
El proceso para obtener una de estas 30.000 visas se realizará completamente en línea, abriendo desde este 6 de enero en la dirección web www.uscis.gov/CHNV.
La solicitud debe ser iniciada por un residente legal en los Estados Unidos, el cual se encargará de “patrocinar” al migrante, haciéndose cargo de sus gastos mientras el proceso se realiza. Estas deben declarar su apoyo financiero y deben pasar varias verificaciones de antecedentes de seguridad, esto para evitar posibles casos de explotación y abuso.
El DHS se encargará de revisar los casos de manera individual, dando una concesión temporal de libertad condicional por hasta dos años a aquellos cuya solicitud sea aprobada.
Esto incluirá la autorización de empleo, pero para esto, el migrante deberá pasar por rigurosos controles biométricos y biográficos de seguridad nacional y seguridad pública. De igual manera, el interesado debe cumplir con los esquemas de vacunación completas y otros requisitos de salud pública.
