DeSantis propone eliminar impuesto a la propiedad en Florida: ¿menos impuestos o más costos?
Expertos señalan que la propuesta es compleja, pues el impuesto a la propiedad es gestionado a nivel local por los condados y las ciudades, no por el gobierno estatal
La propuesta de eliminar el impuesto a la propiedad en Florida ha tomado protagonismo en las últimas semanas. Diversos actores políticos y expertos han discutido sobre las posibles consecuencias de esta medida, que busca reducir la carga fiscal sobre los ciudadanos.
Sin embargo, la pregunta que muchos se hacen es si, de eliminarse este impuesto, realmente se logrará una reducción significativa en los pagos al gobierno.
El periodista Juan Manuel Cao, de América Tevé, destacó recientemente que el impuesto a la propiedad debería eliminarse por completo, mencionando el ejemplo de Hialeah, donde la supresión de este tributo resultó en un impulso a la industria local.
La propuesta también plantea una reflexión más profunda sobre la intromisión del Estado en la propiedad privada, un concepto que históricamente ha sido discutido en Estados Unidos, donde los impuestos directos no existían hasta principios del siglo XX.
Los retos detrás de la eliminación del impuesto a la propiedad en Florida
Pedro García, experto en tasación y exfuncionario en el Condado Miami-Dade durante 16 años, señaló que la eliminación de este tributo es un desafío complejo.
Esto se debe a que el impuesto a la propiedad es gestionado a nivel local por los condados y las ciudades, no por el gobierno estatal. Por lo tanto, el gobernador Ron DeSantis y otros políticos no tendrían la autoridad para eliminar este impuesto en los municipios, aunque sí podrían influir en su reducción.
García también advirtió que, aunque la eliminación del impuesto a la propiedad podría ser una opción, los ingresos perdidos tendrían que ser compensados de alguna manera. Una opción sería aumentar el impuesto sobre las ventas, aunque este tipo de medida podría afectar a los ciudadanos de menores recursos, que destinan un porcentaje más alto de sus ingresos a bienes de primera necesidad.
El impacto sobre los servicios públicos
La eliminación de este impuesto afectaría directamente a los gobiernos locales, que dependen de esos ingresos para financiar servicios esenciales como la policía, los bomberos y la educación. Además, a diferencia de estados como California y Nueva York, donde los impuestos a la propiedad son más altos, Florida no cobra un impuesto estatal sobre la propiedad, lo que alivia a los residentes de mayores cargas fiscales.
No obstante, existen alternativas que podrían mitigar los efectos negativos de una eliminación total del impuesto.
García propuso, por ejemplo, un sistema de exenciones fiscales para ciertos grupos, como jubilados o personas con ingresos bajos, o incluso un reembolso de hasta 1.000 dólares para los propietarios que vivan en sus viviendas. Esto podría aliviar parcialmente la carga fiscal sin generar un déficit insostenible para los gobiernos municipales.
La necesidad de una solución a largo plazo
Aunque la eliminación del impuesto a la propiedad podría ser beneficiosa para muchos residentes de Florida, los efectos de esta reforma son complejos y no resolverían todos los problemas financieros de los gobiernos locales. A largo plazo, será necesario buscar soluciones más sostenibles y equitativas para garantizar que los servicios públicos continúen siendo financiados de manera adecuada.