Las autoridades mexicanas detuvieron a 92 migrantes ilegales procedentes de Cuba y Nicaragua, los cuales intentaban llegar a la frontera de Estados Unidos.
De acuerdo con la información compartida por el Instituto Nacional de Migración (INM) en redes sociales, los migrantes fueron detenidos en el estado de Guanajuato y entre el grupo viajaban al menos 10 menores de edad.
“Durante una revisión de control migratorio y estricto respeto a los #DDHH, INM #Guanajuato identificó a 92 personas migrantes originarias de Cuba y Nicaragua, entre ellos 10 menores de edad. Ninguna de las personas extranjeras pudo comprobar su estancia regular en el país, por lo que fueron trasladados a la Estación Migratoria de la entidad, en tanto se resuelve su situación migratoria”, se lee en la publicación de Facebook.
La institución no especificó el número exacto de migrantes de cada país, pero las imágenes compartidas muestras a los viajeros siendo subidos a vehículos de la INM mientras eran observados por agentes migratorios.
De igual manera, el INM indicó que en el estado de Chiapas se brindó ayuda a una pareja de origen cubano, la cual solicitó ayuda a las autoridades porque su esposa padecía de un trastorno mental y no había podido tomar sus medicamentos.
“Se brindó orientación y apoyo humanitario a un matrimonio proveniente de Cuba, ya que el extranjero solicitó auxilio para su esposa con trastorno de personalidad, la cual no había tomado su medicamento. Pertenecen al grupo de personas que viaja en caravana por la carretera”, redactó la INM en breve un comunicado.
Migrantes cubanos en México
La crisis económica y epidemiológica en Cuba provoca que cada vez más ciudadanos intenten ingresar a Estados Unidos en busca de una mejor vida.
La semana pasada se reportó el caso de un grupo de migrantes cubanos que fue arrestado en un centro de migración en la ciudad de Piedras Negras, en Coahuila, por haber protagonizado un motín.
La prensa local indicó que los cubanos se encontraban detenidos y a la espera de que se resolviera su estado migratorio, pero algunos de ellos se desesperaron por lo que exigieron salir del lugar para intentar cruzar la frontera por su cuenta.
La seguridad del centro migratorio intentó impedir la salida de los cubanos, por lo que estos comenzaron un motín en el que destruyeron propiedad del lugar e hirieron a uno de los guardias.
