Detienen a cubanos en Texas por red de clínicas médicas sin licencia
La detención forma parte de una investigación sobre una red clandestina que opera varias clínicas para interrumpir el embarazo
El fiscal general de Texas, Ken Paxton, informó sobre el arresto de dos ciudadanos de origen cubano, José Manuel Cendan Ley, de 29 años, y Rubildo Labañino Matos, de 54 años, por estar involucrados en una operación ilegal que interrumpía embarazos en el estado.
Los dos hombres fueron detenidos como parte de una investigación sobre una red clandestina que operaba varias clínicas sin las licencias necesarias.
El arresto se produjo el pasado 17 de marzo, cuando Cendan Ley, quien había llegado a Estados Unidos de forma irregular en 2022 y estaba bajo libertad condicional, fue capturado por su participación en la Clínica Waller Latinoamericana, ubicada en Waller, Texas.
Por otro lado, Labañino Matos, enfermero practicante, regresó a Texas desde Cuba el 8 de marzo y enfrenta cargos por conspiración para ejercer la medicina sin la licencia adecuada.
Según un comunicado oficial de la oficina del fiscal, ambos arrestados formaban parte de una red que operaba en varias instalaciones de salud en Texas, incluyendo la Clínica Latinoamericana Telge en Cypress y la Latinoamericana Medical Clinic en Spring.
Estas clínicas estaban siendo gestionadas por María Margarita Rojas, conocida como “Doctora María”, quien también fue arrestada en la misma fecha, el 17 de marzo, por su rol en la realización de abortos sin la debida autorización.
Paxton subrayó la postura firme de su administración en la protección de la vida, afirmando que “en Texas, la vida es sagrada” y que su gobierno se compromete a luchar contra las actividades ilegales relacionadas con el aborto.
La Ley de Protección de la Vida Humana de Texas de 2021 prohíbe los abortos en el estado, y cualquier violación de esta ley puede resultar en sanciones civiles de hasta 100.000 dólares por cada infracción.
Como parte de la investigación, Paxton solicitó una orden de restricción temporal para cerrar las clínicas involucradas, con el fin de prevenir futuras violaciones a la ley.
La investigación fue realizada por la División de Aplicación de la Ley del Procurador General de Texas, en colaboración con el Fiscal de Distrito del Condado de Waller, Sean Whittmore, y el caso ha sido remitido para su enjuiciamiento.