El Zoológico Nacional de Cuba cierra sus puertas al público por escasez de combustible
La escasez de combustible continúa haciendo de las suyas en la Isla, con el Parque Zoológico Nacional de Cuba anunciando en sus redes sociales que cerraría sus puertas al público hasta nuevo aviso debido a la situación con la gasolina.
El reconocido zoológico capitalino no puede funcionar sin este preciado recurso, pues sus visitantes realizan gran parte de los recorridos a bordo de una guagua que atraviesa los espacios en los que se encuentran los animales.
La institución no dio muchos detalles en el comunicado compartido en sus redes sociales, limitándose a decir que el cierre sería momentáneo, sin embargo, el zoológico no especificó ninguna fecha para su reapertura.
Al respecto, muchos internautas lamentaron lo ocurrido, en especial por los niños, los cuales acababan de perder una opción más para entretenerse en la Isla. Otros recordaron que el Zoológico de La Habana, conocido como el Zoológico de 26, también cerró “temporalmente” en febrero tras detectar un foco de gripe aviar entre sus animales.
Otros se mostraron molestos por la situación por la que atraviesa la Isla, señalando que el país se encuentra peor cada día.
“Nada nuevo que cierren todo, si total ni hay ni p*nga. Ya no se puede sacar a los niños a ningún lado porque todo está re carísimo y particular porque el estado, ni señales de humo. Estamos a punto de extinguirnos, DPEPDE”.
Es importante señalar que esta no es la primera vez que el combustible afecta negativamente al parque, pues a mediados de 2022, este redujo la cantidad de recorridos que hacía al día, pues sus vehículos no contaban con la gasolina suficiente para satisfacer la demanda de los visitantes.
Durante esa ocasión, el zoológico se limitó a realizar los recorridos los viernes, sábados y domingos. La medida, la cual duró dos meses, se implementó en medio de la etapa vacacional.
El zoológico más grande de la Isla permaneció cerrado durante la pandemia de COVID19, sin embargo, desde antes de esto había pasado por largos periodos en los que estaban suspendidas las actividades dentro de sus muros, reduciendo cada vez más los recorridos de safari debido a la crisis económica y energética del país.