Estudio revela que el consumo de hasta 25 tazas de café no fomenta el endurecimiento arterial
Por años ha existido una controversia en torno al consumo excesivo del café; mientras algunas personas afirman firmemente que la ingesta excesiva de café nos hace propensos al padecimiento de enfermedades cardiovasculares como palpitaciones, arritmias, hipertensión arterial y ateroesclerosis; otras personas, por el contrario, exaltan sus bondades asegurando que al ser un estimulador del sistema nervioso central nos ayuda a estar alertas, despiertos y activos.
Ante esta circunstancia queda la duda, ¿el consumo de café es bueno o malo?
En miras a determinar si la ingesta de café logra perjudicar la rigidez de las arterias, British Heart Foundation ha decidido patrocinar un estudio, a través del cual se evaluaría la influencia de las proporciones de café consumidas en la condición de las arterias de las personas, consiguiendo un interesante resultado.
British Heart Foundation, es una organización benéfica del Reino Unido que se dedica a trabajar por la lucha de las diversas enfermedades cardiovasculares y los factores de riesgo que ponen propensas a las personas para su padecimiento.
Para llevar a cabo dicha investigación fue tomado un grupo de 8.412, con hábitos cafeínicos variados, dividiendo esta población en tres subgrupos: uno de personas que consumía menos de una taza de café diario, personas que consumía hasta tres tazas de café y por últimas personas que consumían entre 4 y 25 tazas de café.
Posteriormente, les realizaron estudios de resonancia magnética y pruebas de onda de pulso infrarrojo, encontrando que aunque la cantidad de café consumida por cada grupo era bastante variada, no se apreció una mayor tendencia al endurecimiento arterial (ateroesclerosis) en el grupo donde había mayor consumo versus el de menor consumo.
Pudiendo así determinar por medio de esta investigación que tomar más de tres tazas de café no incrementa la rigidez de los vasos sanguíneos considerablemente en comparación con los que beben menos de una taza al día, afirmando que el consumo de café no necesariamente va separado de un hábito de vida saludable; de esta manera lo ha declarado Kenneth Fung, el líder del estudio.
Así mismo, agregó que ante estos resultados la invitación no es a incrementar el consumo de café hasta 25 tazas diarias (límite superior del estudio) sino a disfrutar de su consumo, sabiendo que no colaborará directamente con el desarrollo del endurecimiento arterial.
De esta manera podemos concluir que, aunque la presencia de cafeína es un elemento cardioestimulante, esta no influye directamente sobre el desarrollo de una ateroesclerosis; sin embargo, es importante tomar en cuenta que sí logra aumentar la frecuencia cardíaca y ponernos propensos a una hipertensión arterial.
Ningún exceso es bueno, por lo que por nuestra salud (y la salud de nuestro corazón) el consumo del café debe ser evaluado y adecuado a las características y tolerancia de cada persona, no siendo recomendado el exceso en personas que padecen de procesos cardiovasculares como hipertensión arterial y arritmias cardíacas.