Etecsa alerta sobre aumento de vandalismo en contra de la telefonía fija
La empresa señala que esto no solo interrumpe los servicios de voz e internet de los hogares, sino también genera daños materiales y económicos para el país
La estatal Empresa de Telecomunicaciones de Cuba S.A. (Etecsa) informó sobre un notable aumento en los actos vandálicos efectuados contra la infraestructura necesaria para mantener la telefonía fija en la capital cubana.
De acuerdo con un informe especial compartido en la Televisión Cubana, se han registrado múltiples eventos que han resultado en la interrupción prolongada de los servicios básicos y en daños económicos considerables para la empresa.
Este reporte destacó que una de las zonas en las que más ocurre esto es en el Wajay, donde los residentes y las instituciones se han quedado sin servicio de telefonía fija debido a cinco incidentes de vandalismo separados.
En cuatro de estos incidentes se robaron más de 180 metros de cable (en cada caso), mientras que en el quinto, el cable fue cortado, interrumpiendo el servicio de la población.
La meta principal de estos robos sería la extracción del cobre, un material que puede venderse a un buen precio en el mercado negro de la Isla, donde casi todo artículo puede ser comerciado debido a su escasez en el país.
De acuerdo con el reporte, situaciones como esta se repiten con mayor frecuencia a lo largo de La Habana, lo que deja en evidencia la crisis económica que azota al país y obliga a sus ciudadanos a buscar cualquier manera para obtener dinero.
Según las cifras compartidas por Etecsa, durante el último trimestre de 2023 se registraron 24 actos de vandalismo similares en contra las redes de telecomunicaciones en la capital, mientras que en lo que va del 2024 ya se han reportado unos 25 incidentes.
Al respecto, los directivos de Etecsa que fueron entrevistados durante el reportaje señalan que estos actos no solo interrumpen los servicios de voz e internet de los hogares, sino también generan daños materiales y económicos para la Isla, pues los cables robados son de calibre grueso, uno muy costoso y difícil de conseguir.
La empresa estatal utilizó la situación como una excusa perfecta para justificar el pésimo servicio de telecomunicación en la Isla, pues asegura que para resolver el problema, se han tenido que redirigir recursos destinados a nuevos desarrollos.
El reportaje oficialista señala que los municipios capitalinos más afectados son los de Arroyo Naranjo y Boyeros, señalando además que las consecuencias de estos actos se extienden más allá del sector residencial, pues impactan también a hospitales, policlínicos y escuelas en la zona.
Por último, funcionarios de Etecsa indicaron que varios ciudadanos han sido detenidos por haber cometido algunos de estos actos, pero que la recuperación del material robado ha sido complicada.