Expulsan del ejército a militares sudafricanos que se “amotinaron” mientras estudiaban medicina en Cuba

Un grupo de 35 militares sudafricanos que fue expulsado tras un presunto motín mientras estudiaban medicina en Cuba fue dado de baja del ejército.

El incidente ocurrió en 2019, luego de que los militares se negaran a asistir a clases debido a que el servicio docente de la Isla era insatisfactorio.

De acuerdo con el medio local News24, estas personas ya no podrán reintegrarse a las Fuerzas de Defensa Nacional de Sudáfrica (SANDF, por sus siglas en inglés) debido a que demostraron un comportamiento “inaceptable”.

El grupo fue enviado a Cuba en 2017, donde debían estudiar la carrera de Ciencias Médicas, a la Escuela Interarmas General ‘José Maceo’, en Santiago de Cuba, una de las facultades de la Universidad de Ciencias Médicas de La Habana.

Sin embargo, en 2018, aseguraron a la SANDF que la escuela no estaba acreditada para dar clases, y que el servicio docente de la institución era “insatisfactorio”.

De igual manera, aseguraron que la escuela en Santiago de Cuba no ofrecía un certificado de registro para los estudiantes de primer año, requisito necesario para ingresar como estudiantes de medicina al Consejo de Profesiones de la Salud de Sudáfrica (HPCSA).

Las autoridades sudafricanas señalaron que estas quejas eran solo especulaciones, por lo que los militares iniciaron actividades de protesta dentro de la escuela, entre ellas dejar de atender a clases.

Como resultado, fueron expulsados, pues parte del acuerdo al que llegaron antes de viajar a Cuba era que debían de asistir a todas las clases y sesiones de entrenamiento, algo que no se cumplió.

Los estudiantes también presionaron a militares más nuevos para que se unieran, ensuciando los baños y dejando las llaves de agua abiertas toda la noche, lo que provocaba que los otros cadetes no pudieran bañarse.

En 2019, se les informó que iban a ser dados de baja del SANDF por “amotinamiento”, por lo que las autoridades les exigieron a cada uno justificaciones escritas de por qué no deberían ser expulsados, algo que no hicieron.

Los militares enviaron cartas en las que solicitaban ser inscritos a otra institución, preferentemente en Sudáfrica, que cumpliera con los estándares exigidos por el HPCSA, pero fueron expulsados de todos modos y ordenados a salir de Cuba.

Los militares llevaron su caso ante la Corte Suprema de Apelaciones (SCA), la cual inicialmente les dio la razón y ordenó que fueran readmitidos a las SANDF. Sin embargo, la SANDF apeló y solicitó que los cadetes no pudieran reintegrarse.

Tras revisar nuevamente el caso, la SCA dictaminó que el comportamiento de los militares fue similar al de un amotinamiento, por lo que terminaron siendo despojados de la oportunidad de reintegrarse a las fuerzas de defensa de su país.