La Unidad Empresarial de Base (UEB) Mathisa, encargada de elaborar íntimas en la provincia de Sancti Spíritus, se encuentra paralizada desde finales de enero debido a la falta de materia prima.
De acuerdo con el medio oficialista Escambray, la fábrica estatal podría permanecer paralizada hasta el próximo mes de julio.
La producción de este demandado artículo frenó a causa de la falta de polietileno, el cual fue comprado por última vez a México.
Esta fábrica es la única que elabora almohadillas sanitarias en el centro de la Isla, y sus productos llegan a la provincia de Matanzas y parte de Las Tunas.
Hasta 2021, producía unos 14 millones de paquetes de íntimas, cifras que se reducirán bastante este año.
“En el año 2023 tenemos una planificación de 4 millones 500 mil paquetes de almohadillas. Ese es el financiamiento con el que contamos este año para la fabricación de almohadillas. En el año 2022 tuvimos una mejor situación, pero este año no tuvimos esa suerte”, declaró al citado medio Ángel Pozo González, director de la UEB.
El funcionario aseguró que las negociaciones para conseguir polietileno de otros proveedores ya están “hechas”, solo falta supuestamente la elaboración y el transporte de esta materia, algo que puede tomar tiempo.
“El financiamiento está aprobado, solo falta que el proveedor fabrique la materia prima que tenemos en déficit y se ejecute el embarco, un proceso que puede demorar todavía un mes más”.
Como era predecible, Pozo culpó al embargo que EEUU mantiene sobre el régimen castrista para justificar esta escasez y la demora antes de una solución, algo que suele hacer cualquier alto funcionario ante la prensa oficialista.
“Sabemos que la situación que tiene el país es compleja y las materias primas tienen que arribar, o hacer un proceso de trasbordo en varios puertos por el tema ‘bloqueo’ y se pronostica que sobre el mes de julio la fábrica de almohadillas sanitarias esté produciendo de nuevo”, finalizó.
Con el fin de mayo, empieza el último mes del segundo trimestre del año, tiempo durante el cual la fábrica no ha producido las íntimas que necesita el pueblo cubano. Como consecuencia, los precios de estos artículos se encuentran por los cielos en el mercado informal, donde un solo paquete de almohadillas sanitarias alcanza hasta los 200 pesos cubanos (CUP).
