Un nuevo asesinato ha revivido el debate sobre el control de armas, luego de que una madre fuera asesinada mientras caminaba con su bebé en calles de Manhattan, Nueva York.
La mujer de 21 años llevaba a su bebé de 3 meses en una carriola por el vecindario de Upper East Side, cuando un tirador se le acercó y le disparó a quemarropa en la cabeza.
El comisionado de la policía de Nueva York, Keechant Sewell, señaló en conferencia de prensa que los hechos ocurrieron la noche de este miércoles 29 de junio, alrededor de las 8:20 pm.
La mujer fue declarada muerta hasta después de ser trasladada al hospital, mientras que el infante, que no resultó herido, fue llevado también al hospital local para su revisión.
El sospechoso fue descrito por testigos como un hombre que vestía sudadera con capucha negra y pantalones negros, el cual huyó de la escena a pie.
Las autoridades no revelaron el nombre de la víctima, pero Lisa Desort la identificó como su hija, Azsia Johnson, en entrevista para NBC New York.
Desort reveló que Johnson había sido previamente víctima de violencia doméstica por parte del padre de su hijo pequeño.
Con esto el crimen adquiere la categoría de feminicidio (femicide), aunque la figura penal no está contemplada en el sistema estadounidense como tal.
“La ciudad le falló a mi hija, porque el 1 de enero, mi hija me llamó y me dijo que estaba siendo abusada mientras estaba embarazada de seis meses”, dijo Desort a NBC.
“Tenía miedo de llamar a la policía, así que me dio la dirección. Llamé a la policía”, añadió.
La concejala Julie Menin, cuyo distrito incluye parte del Upper East Side, dijo el jueves por la mañana que la policía detuvo a una persona de interés.
Menin también confirmó que la víctima era la madre del bebé y sugirió que el incidente “podría involucrar violencia doméstica”.
El caso reavivó el debate sobre el control de armas, luego de que el alcalde de Nueva York, Eric Adams, señalara que esto sería vital para reducir la inseguridad en la ciudad.
“Hemos estado abordando el problema de la sobre proliferación de armas en nuestras calles, cuán fácilmente accesibles son, y cómo simplemente no hay miedo al usar estas armas contra neoyorquinos inocentes. Esto es el resultado de todo eso”, expresó Adams.
El argumento cobra más peso en medio del descontento social, luego de que la semana pasada la Suprema Corte anulara el derecho constitucional a abortar, pero dejara de lado el control de armas por considerarlo “inconstitucional”.
En los últimos meses, han sido varios los tiroteos en lugares públicos en Nueva York. En abril pasado, un hombre detonó botes de gas en un vagón del metro, lleno de gente, y abrió fuego contra los pasajeros, dejando 26 personas heridas.
En mayo, un pasajero del metro fue asesinado a tiros en un ataque no provocado, mientras que otro tirador atacó un supermercado en Buffalo, dejando 10 muertos, cuyos asesinatos transmitió en vivo por internet.
