Los niveles de inseguridad en la Isla han ido en aumento durante los últimos meses, y esto ha quedado en evidencia una vez más en La Habana, donde una niña de 13 años fue asaltada a plena luz del día.
El vergonzoso hecho fue denunciado este domingo 28 de mayo por la internauta Elizabeth Valdés Luis, madre de la víctima.
Según la mujer, su hija fue agredida por dos hombres que la amenazaron y le quitaron su teléfono celular.
“Hace apenas unas horas a mi niña de 13 años la asaltaron en calle 52, entre 23 y 25, municipio Playa. Dos muchachos con un pañuelo en la boca (ella no puede reconocerlos) a plena luz del día, para quitarle el teléfono”, se lee en la denuncia compartida en Facebook.
La publicación asegura que la menor ni siquiera tenía su celular afuera, pero los sujetos se le acercaron y la obligaron a entregarlo, esto luego de que le apretaran la mano, le torcieran los dedos y le hicieran un pequeño corte con un “objeto” desconocido.
Una fotografía compartida por la internauta mostró la herida que sufrió la pequeña, quien se dirigía a casa luego de haber acudido a una casa de estudio.
Valdés sostiene que los niveles de inseguridad en la Isla se encuentran por los cielos, algo que encuentra irónico considerando la cantidad de fuerzas policiales que hay en Cuba. Al respecto, apuntó a que estas se encuentran dedicadas a reprimir a aquellos que piensan diferentes, por lo que ahora no tienen tiempo ni de proteger a los más jóvenes.
“Cuba se ha convertido en una cueva de ladrones y asaltantes, es terrible pensar que hay un cuerpo policial enorme para reprimir y abusar de las personas que piensan diferente (como pasó el 11J) y que no haya patrulleros suficientes para cuidar que no le pasen estas cosas a una niña”, condenó.
La usuaria de Facebook responsabilizó directamente al régimen castrista, pues la crisis económica impulsa a los extremos a los que la gente está dispuesta a llegar para sobrevivir en la Isla.
“Díaz-Canel, estás matando de hambre a un pueblo, estás creando violencia y terror. Cojan sus millones y lárguense de la Isla ya”, agregó.
Por último, afirmó que, de seguir así la situación, se negaría a llevar a su hija a la escuela, algo que no consideraba una gran pérdida.
“Mi hija no va más a casas de estudios, y si empeora la violencia, no irá ni a la escuela, total, hasta la educación cubana es una porquería. La pandemia más grande de la Isla es el hambre”, finalizó.
