La actriz y cantante estadounidense nacida en Puerto Rico, Jennifer López, se unió al grupo de artistas boricuas que decidieron levantar su voz y unirse a su pueblo, en su petición por la salida del poder de su actual presidente, Ricardo Rosselló.
En medio del concierto celebrado en el Amway Center de la ciudad de Orlando, Florida, la Diva del Bronx dedicó unas emotivas palabras a sus compatriotas, por medio de las cuales quiso transmitir “todo su amor a Puerto Rico”.
“Estamos luchando. Estamos luchando por un mejor mañana y un mejor futuro. Y estamos con ustedes esta noche, y siempre a su lado… Somos fuertes. Vamos a salir de esta”, sentenció la cantante.
El pueblo puertorriqueño actualmente lleva once días continuos de protestas y manifestaciones solicitando la renuncia del presidente Rosselló, luego de que se hiciera pública una conversación telefónica en la que, junto a otros dirigentes políticos, insulta y se burla de varios periodistas, actores, músicos, políticos y miembros de la comunidad LGBT+.
A esta lucha del pueblo de Puerto Rico, se han sumado varios artistas originarios de ese país, quienes se han manifestado indignados por lo ocurrido y manifestándose como ciudadanos a través de su asistencia a las diferentes concentraciones que han sido convocadas por parte de los dirigentes que lideran la protesta que exige la salida de Rosselló de la presidencia de la república.
Entre los artistas puertorriqueños que también piden la renuncia del presidente se encuentran Ricky Martin, Daddy Yankee, Olga Tañón y Bad Bunny. Este último incluso decidió paralizar por completo su agenda artística y declararse retirado temporalmente de la música hasta que no se consiga que el presidente deje de ocupar el cargo.
Por su parte, el pasado domingo 21 de julio el mandatario puertorriqueño hizo público un comunicado oficial, en el que da respuesta a las peticiones expuestas por los manifestantes del país, asegurando que no se lanzará a la reelección el próximo año y que además se retiraba de la presidencia del Partido Nuevo Progresista, pero que no desistiría de su cargo como máximo mandatario de la nación.
“Reconozco que disculparme no es suficiente. Solo mi trabajo ayudará a restaurar la confianza de estos sectores y encaminar una verdadera reconciliación… Debo ser respetuoso con el orden constitucional y le doy la bienvenida al proceso comenzado por la Asamblea Legislativa, el cual enfrentaré con toda la verdad, con fuerza y de manera responsable”, rezaba el comunicado de Rosselló.
Ante la negativa del político, el pueblo se ha mantenido en la calle y solicitan que la Presidencia Legislativa del país proceda a llevar a cabo la ejecución de un “residenciamiento”, el cual es un mecanismo amparado en la Constitución de Puerto Rico con el que se puede someter al presidente a un juicio político, que podría conducir a su destitución.